Felipe Arrieta Sánchez
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La inesperada muerte del actor Gary Coleman (Arnold), el pasado 28 de mayo, se suma a las trágicas trayectorias de las exestrellas de la popular comedia.

Tanto Coleman como Todd Bridges y Dana Plato tocaron fondo al finalizar la serie en 1986, lo que se conoce como la “Maldición de Blanco y Negro”.

Gary y Dana están muertos, el tercer niño, Todd, pasó por años de consumo de drogas y fue exonerado en un juicio por homicidio en 1989.

Los intentos de Coleman por mantenerse en el espectáculo le depararon tristes papeles y hasta llegó a trabajar como guardia de seguridad en un centro comercial de Los Ángeles.

A pesar de esto, Coleman corrió con mejor suerte que Plato, quien murió por una sobredosis de drogas en 1999.

Dana tuvo una vida marcada por la adicción a los estupefacientes y el alcohol, así como por su participación en la revista Play Boy y en una película porno.

Bridges ha debido recorrer otro camino pedregoso. Se volvió adicto al crack y se metió en el submundo de la delincuencia en la ciudad de Los Ángeles

Este último es el único con un final feliz, ya que logró superar su adicción y ahora da charlas sobre los peligros de las drogas y ha tenido breves participaciones en Hollywood.

Curiosidades

Gary Coleman

Sufría de una enfermedad renal que le impidió su crecimiento, su muerte fue inesperada.

Dana Plato

Su hijo, Tyler Lambert, se suicidó meses atrás al no superar la muerte de su madre.

Todd Bridges

Se vio envuelto en un homicidio del cual salió bien librado en 1989.

Conrad Bain

El único libre de la “maldición”, se retiró de la actuación y tiene 87 años, vive en Los Ángeles.