Domingo 2 de mayo de 2010, San José, Costa Rica
Nacionales | De hoy
El Evangelio

Álvaro Sáenz Zúñiga

Comparta 
Agregar a Twitter  Agregar a Facebook  Agregar a Google Bookmarks  Agregar a Live  Agregar a MySpace 

Cuando un costarricense hace algún trámite, debe presentar su cédula de identidad. Cuando está en el extranjero, su pasaporte. Si los cristianos queremos que se nos reconozca como tales, debemos mostrar la identificación que Cristo propone en su Evangelio. Cualquier persona que quiera ser reconocida por su condición cristiana debe mostrar, no un carné ni un elemento externo, sino su amor, su espíritu de entrega por los demás, su capacidad de renuncia a sí mismo, es decir, debe parecerse a Cristo.

Quizá la clave esté en la primera frase del evangelio, que desconcierta porque explica la muerte de Cristo de modo diferente. El texto dice: “el Hijo del hombre ha sido glorificado”. Según San Juan, evangelista de la intimidad, la cruz de Cristo es su gloria y su modo de dar gloria al Padre, porque Dios es amor y nadie le da gloria sino amando hasta dar la vida por los amigos. Si queremos ser glorificados con Cristo, debemos estar dispuestos a morir por el hermano, a entregarnos por su bienestar y su paz. Solo así daremos gloria a Dios.

Este es el testamento de Cristo. Él nos da el mandato nuevo que es también antiguo. Nos enseña a creer en Dios activamente. A creer en aquel que nos ha mostrado su absoluto amor al darnos a su único Hijo para que nos recuperara, para que, por amor, salvara a la humanidad, a esta criatura humana tan dañada, frágil y extraviada en errores.

Los creyentes en Cristo, fortalecidos por la Iglesia, debemos dar testimonio ante el “pecado del mundo” y hacerlo con vigor, no por bonito o romántico. Al contrario, el amor que Cristo nos pide es amor de cruz, amor en el que se arriesga hasta la vida, con tal de que el hermano alcance su dignidad y la estabilidad que merece, sea esta laboral, salarial, en su salud, en su familia, que tenga vida plena.

Nuestra identidad es que nos amemos unos a otros como Cristo nos amó.

Publicidad
Publicidad
 
Recomienda esta página a un amig@
Recomienda esta página a un amigo

© 2010. Periódico Al Día. El contenido de aldia.cr no puede ser reproducido, transmitido ni distribuido total o parcialmente sin la autorización previa y por escrito del Periódico Al Día. Si usted necesita mayor información o brindar recomendaciones, escriba a webmaster@aldia.co.cr.