Carlos Láscarez S.
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Desamparados.- Un bodeguero de 19 años es sometido a juicio desde ayer por el asesinato de Evelyn Andrea Granda Leiva, de 20 años, contra quien idearon un plan para matarla y luego apoderarse de su bebé de 22 días.

El sospechoso responde al apellido Morales y era vecino de la víctima, en la urbanización Las Brisas de Desamparados.

Por los delitos de homicidio calificado, sustracción de menor y abandono, una mujer de apellido Solís (autora intelectual) fue condenada mediante un proceso abreviado a 20 años de cárcel.

Otra vecina de apellido Umaña, quien al inicio fue detenida por el OIJ, negoció con la Fiscalía y ahora se convirtió en testigo estrella. Ella participó en la preparación del té de canastilla y el plan de ejecución, no así la muerte.

Durante la lectura de la acusación la fiscal Ivania Delgado Calderón, aseguró que la muerte y posterior robo del niño fue ideado por Solís con el objetivo de mantener a su esposo a su lado, luego de que le hizo creer que estaba embarazada.

“La acusada Solís en conjunto con Morales, un hombre de apellido Sánchez y una menor, idearon un plan para adquirir un hijo y luego hacerlo pasar como de Solís. Hasta organizaron un té de canastilla donde participó la vecina Umaña, a quien se le lleva un proceso aparte”, expuso Delgado.

Agregó que como la fecha del supuesto parto se acercaba necesitaban ubicar un menor rápido, hasta que ubicaron a Granda, a quien le dijeron que Solís le regalaría ropa para su niño. Una vez dentro de la casa, le roban al menor, por lo que Solís la toma por la fuerza y Morales le coloca un instrumento en el cuello hasta que la asfixió. Seguido, la tiró al suelo y la envolvió en bolsas negras, mientras se despojaba de unos guantes y un trapo de la cabeza.

Luego lanzan el cuerpo de la víctima a la margen del río Jorco y se apoderan del hijo de Granda.

El sospechoso se abstuvo de declarar por recomendación de su abogada Yorleny Clark.

Quien sí declaró fue el excompañero de Solís, un hombre de apellido Montoya, quien aseguró que siempre creyó que su mujer estaba encinta. “Siempre he querido ser padre. Hubo momentos donde me puse a dudar y a pensar si en realidad esperaba un hijo. Teníamos muchos planes”, dijo Montoya mientras lloraba.

La víctima

Evelyn Andrea Granda

Edad: 20 años