Hugo Solano
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Corredores - Con piedras en la mano, vecinos de La Cuesta, en la frontera con Panamá, esperaban el final de un operativo del OIJ para tratar de impedir la captura de un hombre de apellido Hernández, detenido el lunes pasado y ligado a una banda narco.

La Fuerza Pública tuvo que redoblar los refuerzos mientras agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) lo sacaban esposado y decomisaban carros, armas y demás evidencias.

Con él cayeron otras cinco personas, entre ellas un miembro del Grupo de Apoyo Operacional del Ministerio de Seguridad.

La acción de los vecinos para proteger al sospechoso y una nueva infiltración del narco en las fuerzas policiales reflejan lo que sucede en el cantón fronterizo de Corredores, Puntarenas.

La Policía no descarta que ayudas del narco al vecindario motiven esa protección.

Líderes comunales, policías, Iglesia y otros habitantes viven entre la zozobra de grupos que aprovechan la anarquía vial, caminos clandestinos y falta de vigilancia en la línea fronteriza para mover millonarios cargamentos de droga que abastecen el mercado nacional.

Nueve personas vinculadas a una de las bandas que operan allí con la modalidad de pequeños envíos en carros cayeron tras acciones de la sección de estupefacientes, en coordinación con el OIJ y la Fuerza Pública de Corredores.

A los seis que fueron detenidos el lunes, el Juzgado Penal de Corredores les dictó tres meses de prisión preventiva.

Un seguimiento minucioso permitió al OIJ detectar los movimientos del grupo, tras la captura de una pareja en Atenas con 18 kilos de coca ocultos en el tanque de combustible. Se dirigían de Paso Canoas a San José.

En otra de las rutas usadas por esta banda, la Policía de Control de Drogas detuvo a un mecánico de 60 años, de apellidos Ezeta Ríos, quien fue condenado a seis años de cárcel, al someterse a un proceso abreviado.

Llevaba 28 kilos de coca ocultos en el tanque de combustible y se le liga a la misma banda. Iba por la ruta de Coto Brus para salir a Paso Real, Buenos Aires, Pérez Zeledón y San José.

Fuentes ligadas al caso explicaron que los dueños de la droga, procedente de Colombia, vía Panamá, optan por el “contrabando hormiga”, porque si la Policía los captura, la pérdida no es tan grande como en la modalidad de furgones, muy usada años atrás.

El director del OIJ, Jorge Rojas, reveló que el policía detenido, de apellido Ortega, avisaba al grupo cuáles eran los momentos oportunos para mover la droga.

El perfil de los detenidos es muy variado. Además del policía, está un hombre de apellido Hernández, comerciante de 42 años, una estudiante de derecho, de apellido Segura y de 27, y su hermano de 23 años, de oficio desconocido.

También está ligado un taxista pirata, de apellido Umaña, alias “Marañón” y el presunto líder del grupo, conocido como “Macho”, de apellido Arias y de 46 años.

Según la Policía, se notaba un desproporcionado aumento en el nivel de vida de los detenidos.

En el caso de Hernández, tenía carros, armas, un restaurante y levantaba una construcción de piscina con tabogán y un salón grande detrás de su local.

La estudiante de derecho alquilaba una casa grande, donde habían hamacas colgantes, máquinas de hacer hacer ejercicios y, según vecinos, era gente muy silenciosa. Ocasionalmente, llegaban carros.

Umaña,de 28 años, tenía su casa y levantaba otra en La Cuesta.

El abogado defensor de Hernández, Jorge Moncreffe, dijo que analizarán las intervenciones telefónicas y evaluará toda la prueba en aras de beneficiar a su cliente. Apeló la prisión preventiva.

Sobre la falta de vigilancia en la frontera, el ministro de Seguridad, José María Tijerino, dijo que pedirá un informe detallado.

¿Sopresa?

Gerardo Campos.

Gerardo Campos P. Policía.

A uno le duelen esos casos con compañeros. Él estuvo año y medio en este puesto de control en Río Claro de Golfito”.

Franciry Ovares Policía, GAO.

Ortega fue mi jefe. Casi no hablaba. El día que llegó el OIJ llamaron a reunión donde la directora y lo esposaron”.

Omar Zúñiga Zapatero, Neily.

Creo que el problema es por la situación económica. En cuanto al policía, opino que en todo el país hay gente así”.

Zulay Flores Dueña de soda.

Ahora no se puede confiar ni en las autoridades. En cuanto al narco, solo yéndose para otro planeta se evita”.

Xinia Contreras Vec. Ciudad Neily

La captura no es ninguna sorpresa. Es preocupante saber lo infiltrado que está el narco”.

Sur en la mira

19/junio/2007

En contra de lo pedido por la Fiscalía, el juez Manuel Sanabria dejó libres a tres colombianos ligados con 923 kilos de cocaína en Sierpe. El juez fue condenado a 16 años.

26/marzo/2009

Un comando irrumpe en los Tribunales de Golfito y recupera 320 kilos de cocaína que se habían decomisado al narco. Tres expolicías y un empleado judicial fueron detenidos.

25/octubre/2010

Un policía del GAO, de apellido Ortega, es detenido por el OIJ. Lo relacionan con una banda dedicada al envío de droga en “doble forro” de vehículos desde Paso Canoas a San José.

“Drogas son el principal foco”

Entrevista a Marisol Flores, Comandante de Ciudad Neily

¿Cómo surge la captura de su subalterno?

Yo tengo cuatro meses de estar aquí. Al llegar supe que se le investigaba y me uní a la causa. Todos los que se infiltren correrán la misma suerte. En esta misma oficina lo esposaron.

¿Cuál es el principal problema en Ciudad Neily?

El tráfico de drogas, los asaltos en los comercios pequeños y el tráfico de indocumentados. También se combate el contrabando de mercadería.

¿Cómo evaden la Policía?

Cada vez se las ingenian mejor para esconder la droga. Usan dobles forros en los carros.

¿Dónde alteran los autos?

Tenemos información de talleres en la zona que se dedican a este tipo de trabajos en carros.

¿Cómo les tomó la captura del oficial Ortega?

Para el personal fue impactante. Quien se mete con el narcotráfico, le vende el alma al diablo y pone en peligro su vida y la de su familia.

¿Actuaba solo?

El caso se indaga hace varios meses y si hubiera otro, habría caído.

¿Cómo combatir esto?

Hay que mejorar los estudios de los oferentes desde que se reclutan. Hay que observar los valores. Una persona con valores, no se vende.

¿Cuál es la zona más problemática del cantón?

Paso Canoas y luego le sigue Ciudad Neily.

Gerardo Ramírez Barquero, alcalde de Corredores, coincide con los vecinos en que el principal problema de Corredores está en la línea fronteriza que, según dijo, es “tierra de nadie”.

“Sabemos que el problema del narcotráfico es nacional, pero por estar más cerca de Colombia por aquí se trasiega la droga vía Panamá”.

El narco se aprovecha de que es una zona afectada por el desempleo. También hay otros problemas serios, como el contrabando y los robos, precisó.

Las principales fuentes de trabajo en la zona las genera el cultivo de palma para la extracción de aceite. Palma Tica, Coopeagropal y Coopetrabasur, así como el comercio y el sector público emplean a la mayoría. Ramírez pidió más policías y que les paguen mejor “para evitar que cambien de bando, como ha sucedido”.

Para el sacerdote Guillermo Villalobos, en la faja fronteriza la gente prefiere callar por miedo. Saben que las consecuencias son graves.

“A las autoridades se le escapa la situación. Es terreno de nadie, empezando por las largas filas de furgones y los carros que se parquean en medio camino. No hay espacio para nada y no hay tráficos ordenando”.

Sostuvo que en las noches se ven policías cerca de bares, pero en las callejuelas limítrofes se observan situaciones muy complejas.

“Entre los tramos que hay a orillas de la carretera y los almacenes, cualquiera puede estar oculto y hacer cualquier cosa. Eso es un mundo oscuro”. A su juicio, las autoridades de ambos países deben crear estrategias que ayuden a mejorar la seguridad.

“Si hoy estamos viendo lo que pasa, ¿qué va a ser de esa zona en diez años, si no se actúa de una vez? Es urgente que se tomen ya las acciones pertinentes de una vez”, comentó.