Procesión de domingo de ramos

Gloriana Corrales
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Cientos de feligreses católicos acudieron ayer a la tradicional procesión de la bendición de las palmas, en la ciudad de San José.

A las 9:45 a.m. arrancaron las actividades en la explanada de la Iglesia de la Soledad y culminó en la Catedral Metropolitana.

Ahí, Monseñor Hugo Barrantes hizo un llamado a poner en práctica el perdón y el pacifismo, como reflexión en el inicio de la Semana Mayor.

Campanadas, bombetas, olor a incienso y hasta una cimarrona anunciaron el inicio de la procesión del Domingo de Ramos.

La imagen del Señor del Triunfo iba montada sobre un burro real, para recrear la historia bíblica de la entrada de Jesús en Jerusalén. Le seguían los monaguillos, sacerdotes y apóstoles.

En las aceras, la gente saludaba al Cristo sacudiendo las palmas benditas recién entregadas.

Al lado de monseñor caminó el alcalde josefino, Johnny Araya, quien aseguró que desde que ocupa ese cargo, asiste a la procesión de inicio de Semana Santa.

Durante el recorrido por el bulevar de la avenida 4 hasta la Catedral Metropolitana, el público se aproximaba para tomar fotografías o para saludar al arzobispo. Esto obligó a la Policía Municipal a atravesar mecates y pedir que despejaran el camino.

La mandataria, Laura Chinchilla se incorporó en la última cuadra, donde había una puerta gigante que simulaba la entrada a la ciudad santa. En la catedral, la afluencia de personas fue tal que muchos se quedaron sin asiento e incluso, presenciaron la homilía desde las afueras del templo.

San Blas celebró

Ayer, por primera vez llegó el Señor del Triunfo a la Parroquia de San Blas de Cartago.

Colaboraron: Francisco Barrantes, Shirley Vasquez, Mario Cordero, y Jorge Calderón.