Nueva Zelanda /AP. - Un errático pingüino emperador, descubierto hace seis semanas en una playa de Nueva Zelanda, pronto regresará a la vida silvestre después de haber suscitado la atención de más de 120.000 visitantes en Internet.
Ese es el número de personas que se han conectado en la red mundial con una cámara que sigue todos sus movimientos. Se anticipa que miles más seguirán su evolución en las próximas semanas, cuando salga en libertad con un rastreador de GPS en el lomo.
Además están los comentarios en las redes de contacto social como Facebook y Twitter.
A sus admiradores no parece importarles que Happy Feet, así nombrado por la película de dibujos animados del 2006, haga poco más que comer, dormir y bambolearse ocasionalmente.
A las 11:20 p.m. en Nueva Zelanda, Happy Feet estaba profundamente dormido con su pata izquierda y su aleta sobresaliendo, escribió un simpatizante en Facebook. Cinco minutos después levantó la pata y la aleta izquierdas y se levantó!
El pingüino fue hallado el 20 de junio en la playa Peka Peka a unos 65 kilómetros al noroeste de Wellington, lejos de su fuente de alimentación antártica. Cuatro días después fue trasladado al zoológico de Wellington cuando se enfermó por comer arena que confundió con nieve.
Ya ha subido de peso y se determinó que ya está en condiciones de regresar al océano.
Su situación conquistó interés internacional. El 30 de junio la emisora local TV3 colocó una cámara en su pequeño reducto en el zoológico.
El director de la emisora en Wellington, Gordon McBride, dijo que él y un colega tuvieron la idea de instalar la cámara y el zoológico estuvo de acuerdo. “A la gente le gusta verlo”, agregó.