Martes 9 de agosto de 2011, San José, Costa Rica

La pareja de moda fuera del cuadrilátero

Amor con guantes

Isaac Lobo

ilobo@aldia.co.cr

Bryan “El Tiquito” Vásquez no se fue muy lejos. No escogió de novia ni a una reina, ni a una modelo, como ocurre con frecuencia en el mundo del boxeo. Hannah Gabriels es su colega y su novia y ambos dicen sentirse felices.

La pareja de moda comparte hoy con los lectores de Al Día detalles muy íntimos de esa relación, como el primer momento en que sintieron mariposas uno por el otro, los chineos que se hacen, la motivación extra que les ha significado en sus vidas y hasta quien es celoso y quien no.

Luego de la reciente pelea de Vásquez, por el título latinoamericano superpluma, Hannah le está curando las cortadas que recibió en el combate del sábado antepasado. ¡Quién más que ella para hacerlo!

A pesar de las bromas que ya la gente les hace sobre todo a Bryan como: “No se fije en otra porque le dan un golpe” y “Si se enojan se suben al ring y ya”, los flamantes novios y pugilistas, por el contrario, dicen que los golpes son sólo para cuando están compitiendo.

“Tenemos como filosofía arreglar las discusiones de forma pacífica y civilizada, conversando, sin cometer errores que tuvimos con anteriores parejas. La peleas son nada más en el cuadrilátero”, cuenta Hannah.

Gato viejo, ratón tierno

Hannah tiene 26 años y Bryan 23, pero eso no importa.

“Él es muy maduro, aunque lo confieso, antes había dicho que nunca iba a salir con alguien menor que yo”, dice la boxeadora riendo.

A Bryan menos que a nadie le preocupa esto. De hecho, manifestó sentirse muy a gusto con ella. “Esa imagen ruda que ella tiene cuando combate es muy distinta a cuando está conmigo, Hannah es la mujer más cariñosa y detallista que conozco”, añade.

De hecho, ella es famosa por ser también campeona en la cocina.

“A mí me encanta todo lo que hace, pero mi platillo favorito son las pastas. Le pido que me haga cada vez que puede. Son muy ricas”, asegura “El Tiquito”.

“Pienso que Bryan está enamorado, porque no creo que cocine tan bien”, bromea la ojos verdes.

No miente, él confesó sin pensarlo que siente mariposas en el estómago y coincide en el sentimiento. “Hace tiempo no me sentía tan completa en todos los aspectos de mi vida. Estoy pasando por un excelente momento”, dice Hannah.

En cuanto al peso tampoco hay bronca. Ella pelea en la categoría de las 154 libras y “El Tiquito” en la de 130, algo que no lo intimidó a la hora de conquistarla.

“Ella siempre fue muy buena amiga. No me costó expresarle mis sentimientos”. “En cuanto a la estatura digo que ella se ve más alta que yo, pero es puro pelo”, añade “El Tiquito”.

Golpes de amor

Llevan cuatro años de conocerse, peleaban y practicaban en el mismo gimnasio.

“Todo empezó en diciembre, cuando fuimos a un campamento, una especie de concentración y allí hablamos mucho, pasamos mucho tiempo juntos y en un momento yo me moría por darle un beso”, confiesa Hannah.

En enero fue cuando las cosas empezaron a ir mejor, aunque Vásquez explicó que él es muy malo para las fechas.

“Nos dábamos besillos a escondidas en el ‘gim’, entre entrenamientos y así todo se fue dando todo, hasta que fue un sentimiento muy fuerte”, detalla ella.

Ante la pregunta de si son celosos “El Tiquito” de inmediato dice que no, pero ante la misma consulta ella contesta lo contrario. “Bryan es muy celoso y yo también. Recuerdo una ocasión en que llegó una muchacha y se le insinuó demasiado y mí no me gustó para nada, pero por dicha todo se aclaró”, recuerda Hannah.