El funeral de “Miguelito” como se le conocía al exintegrante de La Pandylla y La Maffia, tuvo una mezcla algo extraña, ayer en el camposanto La Piedad, ubicado en Santo Domingo de Heredia.
Sus hijos y familiares más cercanos estaban muy afectados, sobre todo cuando el pastor José Velázquez dio unas palabras y su amiga, socia y madrina Walkiry Villalta, lo llamó desde Italia y le expresó todo su cariño.
Las lágrimas brotaron hasta de los más fuertes.
Sentido adiós
La tristeza muy pronto se alejó, como el mismo Miguel lo hubiese querido, porque un mariachi entonó dulces cantos y sus amigos y colegas dedicaron “El criticón”, entre palmas, despidiendo a un amigo que llenó de mucha felicidad a miles de costarricenses que hoy lo lloran.
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