Bogotá/AP.- El sargento de la Policía Luis Alberto Erazo, que el sábado logró huir luego de permanecer 12 años en poder de las FARC, reveló ayer que salvó su vida porque corrió en sentido contrario al de sus cuatro compañeros de cautiverio que fueron ejecutados por los guerrilleros.
Erazo, de 48 años, fue hallado por el Ejército en zona rural del municipio de Solano, en el departamento de Caquetá, a unos 418 kilómetros al suroeste de Bogotá.
El Ejército había chocado más temprano en la misma región con unidades de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y halló los cadáveres de tres policías y un militar retenidos desde finales de 1990.
Erazo cayó en manos del grupo guerrillero en 1999, en Curillo, una población de Caquetá.
Como a las 9:00 a.m., yo estoy doblando una toalla... y se viene la granizada de disparos y al momentico siento los impactos, uno en la cara y otro en el cuello, y dije: la cosa ya es conmigo, porque los disparos eran ahí cerquita de mí, narró Erazo durante una entrevista a la emisora Caracol Radio.
En ese momento, lo único que se me ocurrió fue correr hacia el monte... Y se me pegan dos guerrilleros (para tratar de matarlo) y me logré esconder hasta que pasó todo, agregó el suboficial de la Policía desde una clínica de la institución en el occidente de Bogotá.
Erazo recordó que el comandante del frente 63 de las FARC, alias Arturo Rojas, les dijo a los cinco secuestrados que en un cruce de disparos con la fuerza, debíamos correr hacia el lado de los rebeldes, porque ellos nos iban a entregar sanos y salvos.
A la hora del cruce de disparos a mí se me olvida la consigna que me dio este Arturo y corro hacia el monte y mis compañeros corren hacia donde ellos..., y allí fue que (los rebeldes) los mataron a mansalva. Los matan tan malmente que mi capitán (Edgar Yesid) Duarte venía enfermo de un pie... y no podía caminar.
