Luego de peligrar el programa “Combate Internacional”, dada la protesta del equipo ecuatoriano, finalmente hubo acuerdo con ambas producciones de seguir la función. Todavía, horas antes del programa, el enojo y la frustración se habían apoderado de los integrantes de la selección de “Combate” de ese país, a tal punto, que amenazaron con abandonar la competencia y regresar a su casa en América del Sur.
Ayer la producción de “Combate” Costa Rica, desde la mañana, estuvo en un puro estira y encoge con los muchachos sudamericanos, pues estos se empecinaron en dejar todo botado.
Fue a las 4:30 p.m. que Jimmy Tosso, productor del espacio transmitido por Repretel, anunció que sólo tres “combatientes” aceptaron participar en la edición de anoche. Sin embargo, al final de todo el drama, el equipo completo de Ecuador compitió en el programa de anopche.
Se intentó conversar con los jóvenes, pero la productora de “Combate” Ecuador, Marie Joan Pavisic, le dijo a Al Día en el San José Palacio, hotel donde se hospedan, que no iban a dar ninguna declaración.
A Pavisic Al Día la abordó en dos ocasiones, en la mañana y en la tarde de ayer y la respuesta fue la misma.
Saporiti, a diferencia de su compatriota se mostró muy amable. “Me encantaría hablar, pero la producción nos lo tiene prohibido”, señaló la exMiss Ecuador.
El ecuatoriana María José González puso en su cuenta de Twitter antier a las 5 p.m. “No permitiremos que nos humillen más, no somos payasos de nadie pues tenemos el respaldo de mi país Ecuador. Respetan a mi país y punto”.
Puro pleito
Todo se inició la noche del martes en el penúltimo juego que se llama “La lagartija”.
Los sudamericanos se quejaron del público, pues adujeron que el ruido que este estaban haciendo los hizo perder la concentración y que no escuchaban las indicaciones de sus compañeros de equipo.
Esta fue la gota que derramó el vaso pues los roces se venían dando desde que los costarricenses fueron a Ecuador la semana pasada y ellos les ganaron.
Otro de los reclamos fue que las reglas de las competencias no eran claras y que siempre se inclinaban a favor de los ticos.
El martes el asunto se puso más bochornoso cuando la presentadora Doménica Saporiti salió con los ojos llorosos y anunció que sus compatriotas estaban demasiado enojados y que iban a abandonar el reto.
Faltaba un juego todavía y la producción tuvo que hacer malabares para rellenar los minutos restantes. El marcador en ese momento estaba 700 a 1000 a favor de los ticos, la producción otorgó los puntos de “La lagartija” a la selección local por lo que al final de la noche cerraron con una diferencia de 1300 a 700.
“Una vez acabado el programa nos reunimos con los muchachos de Ecuador y con su representante para conversar sobre cuáles eran los puntos que estaban molestos. Pero los ánimos estaban tan caldeados que decidimos que mejor se fueran a su hotel a descansar y que al otro día conversáramos con la cabeza fría”, manifestó Tosso.
Tensas negociaciones
Un equipo de Al Día se fue al hotel San José Palacio desde la mañana para conocer su versión de lo ocurrido.
A las 11:30 a.m. Tosso tuvo una conversación de 45 minutos con Pavisic en el lobby del hotel. Ella no no se cansó de gesticular y de alzar la voz.
“Estoy para negociar y llegar a un acuerdo satisfactorio. Uno en la vida tiene que enfrentar los retos y no huir. A veces en un partido de fútbol el árbitro pita en contra, pero nunca he visto que un equipo se retire”, señaló Tosso.
Aunque a él le pidieron que debía de quitar al público, manifestó que eso era imposible.
“Es gente que ha activado un código, yo no les puedo decir que se vayan, además ellos sabían que en Costa Rica había asistencia”, apuntó el productor local.
Mientras tanto, en un cuarto, el presidente de RTS Luis Esteban Gómez habló con los jóvenes y los instó a que recapacitaran, pues en su país no sabían como rellenar dos horas, pues solo estaba la mitad del equipo.
A las 1:30 p.m. ellos se fueron a almorzar y de compras a Multiplaza. Luego de llamadas y de estiras y encojes, faltando solo dos horas que todos aceptaron.
* Colaboraron Neyssa Calvo y Patricia Recio.
