Los perros son como los niños, no pueden comer de todo, pues hay alimentos que son dañinos para su metabolismo.
Algunos pueden provocar molestias digestivas y otros hasta poner en peligro la vida del animal.
Según el veterinario Luis Martínez como una gracia los dueños de mascotas les dan algún dulce, por ejemplo, sin saber el daño que les hacen a su organismo.
Añadió que entre lo que no pueden comer los perros se encuentra el chocolate, un verdadero veneno.
“Contiene un sustancia tóxica llamada teobromina que puede tener consecuencias fatales para el animal”, precisó Martínez.
Y si se trata de alimentos que suelen procesarse en las cocinas de los ticos, hay que tener especial cuidado, pues provocan enfermedades de difícil manejo.
Si consumen, por ejemplo, ajo en exceso pueden desarrollar anemia, generando diarrea y vómitos y pérdida de apetito. Así como dificultad respiratoria o sangre en la orina, indicó el veterinario Óscar Robert.
Añadió que con la cebolla sucede algo similar aunque el efecto puede ser mayor porque la concentración de tiosulfato es mucho mayor que en el ajo.
El aguacate también contiene persin, otra sustancia tóxica para los perros, recalcó Robert.
Al igual que sucede con los niños, gran cantidad de perros son intolerantes a la lactosa y de consumir leche podrían sufrir gastritis o diarrea, comentó Martínez.
En la lista de alimentos prohibidos se deben incluir las pasas y uvas, pues el perro desarrolla insuficiencia renal, lo que da como resultado vómitos, orina abundante y mucha sed.
“Son animales muy golosos y cuando deciden dejar sus alimentos especiales no hay quien los haga cambiar de opinión. La gente les da pedazos de lo que comen cuando los ven a sus pies sin saber el daño”, advirtió Robert.
