Su voz tierna y la forma tan agradable de ser, le hace juego con su elegancia natural.
Bastaron pocos minutos de conversación con Suzanne Fischel para darse cuenta el por qué don Óscar Arias está enamorado de ella.
Fishel es bella, amable y algo tímida, a pesar de su roce en la alta sociedad costarricense. Se nota que lo suyo no es figurar.
Esta abogada de 51 años contraerá matrimonio con el expresidente el sábado, a las 8 p.m. en una boda muy íntima. Antes de eso, ella abrió las puertas de su futuro hogar, en Rohrmoser, que muy pronto servirá para dar direcciones: “De la casa de doña Suzanne y de don Óscar...”.
Ella habló sobre su primera cita y sobre las actividades que hacen en pareja.
¿Usted se encargó de toda la organización de la boda o don Óscar le ayudó?
Lo hemos hecho entre los dos, porque don Óscar es un hombre muy detallista. No conoce todos los detalles porque le guardamos algunas sorpresas. Me ha ayudado en la organización Michelle Mora, que es una gran amiga y Viviam Quesada que es la maestra de ceremonias.
¿Por qué íntima?
No tuvimos que discutirlo, ambos estábamos de acuerdo en que queríamos algo pequeño, solo entre familia y los amigos.
Usted mantuvo siempre un perfil muy bajo, ahora acapara la atención, ¿Le ha costado acoplarse?
Ha sido un proceso, porque desde que empezamos a salir se ha generado un montón de atención a la cual yo no estaba acostumbrada. Sí produce mucha tensión al principio, pero bueno, con el paso del tiempo uno se lo toma con más tranquilidad.
¿Cómo podría describir lo que siente?
Tengo como las “mariposillas” de las novias. El sentimiento más importante y el más presente es de una gran alegría, de mucha ilusión y de muchas ganas de que llegue el día.
¿Tienen nervios?
Más que nervios es ansiedad.
Luego de una primera experiencia, muchas personas deciden no volver a casarse. ¿Por qué decidió hacerlo?
Porque creemos muchos en la institución del matrimonio, es un gran valor que lamentablemente se está perdiendo. Le queremos dar un muy buen ejemplo a nuestros hijos. Además, es una decisión de puro amor, porque queremos estar juntos.
¿Qué errores anteriores no piensa cometer?
Lo más importante en una relación de pareja es el respeto. Es el cuidado mutuo, el estar siempre atentos a las necesidades del otro y el amor hay que demostrarlo todos los días. Eso quiero hacer el resto de mi vida.
¿Hay acuerdo prenupcial?
No, no lo hemos hecho.
¿Cuándo conoció a Arias?
Nos encontramos en una fiesta. Era la fiesta del 70 aniversario del bufete en el cual yo trabajo, Pacheco Coto. Don Óscar era invitado y en ese momento era presidente de la República por segunda ocasión. Llegó solo y estuvimos conversando toda la noche. Ya nos habíamos visto antes, pero ese día me pidió mi teléfono.
¿Cuándo empezó a conocerlo más a fondo?
Luego de pedirme mi número, empezamos tímidamente. Hablábamos de vez en cuando e íbamos al cine.
¿Qué les gusta hacer?
Precisamente eso nos encanta ir al cine los viernes por la noche. A veces llegamos tarde a la tanda, porque la gente se acerca a saludar a don Oscar. Nos encanta salir a comer y a fiestas en casas de amigos.
¿Cómo fue la primera salida?
No recuerdo bien porque salimos muchas veces antes, como a las fiestas de Palmares. Pienso que fue el concierto de José Luis Perales en el 2009, cuando ya andábamos de la mano y no nos daba pena.
¿Qué la enamoró de él?
De él me gusta todo, es un hombre inteligente, amable, tolerante, respetuoso, es una personal con la cual la vida transcurre fácil. Conversamos mucho, compartimos la música, el teatro y el cine. Además, ambos tenemos mucho sentido del humor, nos pasamos molestando.
¿Este amor es igual que a los 20 o 30 años?
Sonaré como una romántica, pero sí, tengo mucha ilusión.
¿Óscar es una persona romántica?
Sí. A le encanta declarar poesía.
¿Usted lo es?
Sí mucho. Tenemos nuestras cenas en su casa, con velitas, escuchamos música y bailamos solos.
¿Cuál es el regalo aprecia?
Fue el primero que me hizo. Él fue a un viaje y me trajo un prendedor de plata en forma de mariposa.
¿Usted ya vive con él?
No, todavía no.
¿Ya se trajo todo?
Sí, ya pedí varios clósets. Estamos en ese proceso, acomodándonos.
¿Pero ya tiene su cepillo de dientes aquí?
Ah, sí, eso hace rato.
¿Es Óscar Arias un amante de la paz en la casa?
Totalmente, es un hombre muy tranquilo.
¿En una discusión cuál de los dos cede?
Él. Siempre tiende el puente, es una persona con la cual es fácil llegar a acuerdos.
¿Cómo es Suzanne?
No soy brava. Soy tranquila, soy de carácter fuerte, pero me gana la parte tierna.
¿Cómo se lleva con los hijos de él?
¡Lindísimo! Y él con los míos.
¿Sus hijos vivirán aquí?
Sí. Aunque mi hijo menor está con Ignacio. Cuando él quiera se podrá mudar con nosotros.
¿Qué le han dicho sus hijos?
Para los hijos lo importante es verlo a uno feliz.
Cuando salen ¿Quien invita?
(risas) Óscar paga la cuenta, cuando anda billetera, porque a veces se le olvida y tengo que invitar yo.
¿Qué comida prefieren?
Comemos de todo, aunque yo soy más carnívora y él le encanta el pescado.
¿Van al supermercado?
No, Óscar no va al súper, yo sí.
¿Cómo chinea a don Óscar?
Es un gran chineado. Le gusta que le ponga música bonita, tomar un buen vino, quesitos y que le haga masajes cuando está cansado.
¿Y los suyos?
A mi me gusta que me abracen.
¿La luna de miel?
Por el momento no, porque Óscar tiene que ir a Paraguay a principio de diciembre liderando la Comisión de la OEA. Es el fin de año lectivo de mis hijos, entonces no es buen momento.
¿Habló con su ex Ignacio Santos?
Ignacio es le papá de mis hijos, siempre nos va a unir ese lazo. Tenemos una buena relación. Yo lo llamé y le conté que me iba a casar, porque quería supiera de mi boca.
¿Quién es?
Estudios
Es abogada, graduada de la UCR. Su especialidad es Derecho Empresarial.
Trabajo
Es parte del bufete Pacheco-Coto.
Madre:
Tiene dos hijos, María Luisa de 17 años y Rodolfo Santos de 13 años.
Primer matrimonio:
Con Ignacio Santos.
