“Pérez” irá contra la pared al Morera Soto

Gabas apagó la tormenta

Alajuelense mostró otra cara en el Sur y el “ché” le aportó las anotaciones

Pérez Zeledón. - Lo sucedido anoche, en San Isidro de El General, más que otra cosa, parecía una broma de mal gusto para la Liga y Pérez Zeledón, así como para el debut del nuevo entrenador rojinegro Luis Diego Arnáez.

Se fue el fluido eléctrico faltando pocos minutos para las siete de la noche, hora establecida para el inicio del primer partido de la serie entre manudos y sureños, por los cuartos de final del Apertura. Por eso el juego comenzó con media hora de retraso.

Ya con los motores encendidos y en plena acción, la Liga comenzó el juego a todo gas y apenas a los tres minutos se puso al frente con anotación del volante argentino, Pablo Gabas, quien aprovechó un tiro-centro de Cristian Montero.

Alajuelense mostraba una cara diferente y con más personalidad, luego de una semana para el olvido en su club, que vio salir al técnico Carlos Restrepo para que llegara Luis Diego Arnáez, tras los incidentes bochornosos del martes en el juego frente al Municipal de Guatemala.

Pero en la cancha del Sur, Alajuelense trataba de olvidar su semana negra y lo hizo jugando de buena forma.

Todo iba con normalidad y calma para los manudos, pero llegó el segundo apagón cuando se jugaban 20 minutos de la inicial.

Eso sí, tras la reanudación los visitantes no perdieron su Norte y siguieron con buen paso; al tiempo que los de casa no encontraban felicidad en las piernas de sus atacantes Diego País y Bill González.

Luego del descanso reglamentario, Pérez Zeledón entró dispuesto a buscar el empate a como diera lugar y lo consiguió gracias a Bill González (minuto 68), quien resolvió de buena forma utilizando la cabeza y el favor de Wardy Alfaro.

El portero manudo pudo haber hecho más en una jugada que no parecía llevar la pólvora suficiente para terminar en gol.

Tampoco tuvo la pólvora suficiente el manudo Roy Myrie, quien, al 70, se perdió el segundo de la Liga de forma increíble.

Eran los últimos latidos de un partido de buena intensidad que terminó de resolver la figura de la noche, el argentino Pablo Gabas, artífice del segundo gol liguista. La Liga aleja la tormenta.