Miguel Calderón Suárez
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Heredia.- El Tribunal de Juicio de Heredia dictó ayer 30 años de prisión contra Glenn Evans Padilla Campos, de 38 años, luego de encontrarlo culpable de herir a dos policías municipales la madrugada del 13 de febrero del 2008, frente a la casa del boxeador Carl Davies, en San Antonio de Belén.

La lectura del por tanto contra el expreparador físico del púgil estuvo presidida por el juez Óscar Mario Vargas Quesada, quien tras dar a conocer el fallo, resaltó el testimonio de Lenner Montoya, un guarda de seguridad que fue testigo de la balacera.

Él mismo aseguró que Padilla estuvo presente al momento del ataque armado, declaración que fue respaldada por un video de seguridad en donde se observa al imputado llegar al residencial dentro de un vehículo Lancer.

“Tanto la declaración de don Lenner como el video, fueron pruebas fundamentales para la decisión ya conocida del Tribunal”, argumentó el juez Vargas.

Alejandro Araya, fiscal que llevó el caso, se mostró satisfecho con la decisión de los jueces pese a que el Ministerio Público había solicitado 55 años de cárcel contra Padilla. “Es importante el valor que se les dio a los policías municipales Guillermo Brenes Solís y Óscar Rojas Araya, quienes para mí son unos héroes. La Fiscalía está complacida”, aseguró.

Padilla era acusado por dos delitos de tentativa de homicidio calificado. El debate contó con la participación de siete testigos incluyendo el del pugilista Carl Davies, quien según el Tribunal, mantuvo una conversación horas antes de la balacera con su entonces instructor personal.