|
Clásico diferente Julio BUSTOS
Después de muchos años, el clásico nacional entre Alajuelense y Saprissa tiene una característica muy especial.
Se les metió otro equipo para pelearles la punta, en este caso el Herediano, y por eso el juego del domingo tiene una particularidad en especial: ambos tienen que ganar o ganar, para no perder de vista al cuadro florense.
Hay otro elemento en consideración: la participación de ambos equipos en el torneo de Concacaf, y ahí es donde se tiene que tener un cuerpo técnico muy bueno, para recuperar al jugador, que pueda rendir adecuadamente. En este caso, en el clásico.
Tremenda labor tienen los entrenadores, porque tienen que considerar el cansancio de los jugadores que utilizaron el miércoles.
Si va a existir un partido donde los entrenadores van a tener mucha determinación con la toma de decisiones, será este encuentro, donde pareciera que casi no existe un más allá. en cuanto a resultado se refiere.
Ninguno de los dos conjuntos puede alejarse demasiado del puntero, pero a la hora que se juega el clásico ya se sabrá el resultado de los florenses.
Es por eso que no existe otro marcador que el triunfo, porque un empate podría alejarlos de los heredianos.
De ahí que los técnicos procuren, por sobre todas la cosas, imponer el ritmo adecuado a los intereses de su equipo, con la idea de meter a su rival al juego que mejor le convenga.
Ya que si cualquiera de los dos clubes llegan a especular, pensando en aprovecharse de los errores del rival, y por la necesidad de obtener el triunfo, sería un argumento muy pobre.
En teoría vamos a observar un gran partido de fútbol, dentro del terreno de juego. Y ojalá que también haya nota “100” en las gradas.
|
