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“En mi carrera llegaré hasta donde me dejen. Me encantaría tener un Grammy pero no por mí, sino por la gente que trabaja conmigo”, dijo Chenoa.
José RIVERA/Al Día
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Talentosa y sencilla
Chenoa, la novia de Bisbal se quedó en el país promocionando su disco Gabriela SOLANO
gsolano@aldia.co.cr
Chenoa tiene el talento suficiente para triunfar, pero la oportunidad de grabar su primer disco no le llegó fácilmente.
Por eso afirma que en la carrera artística todo es cuestión de contar con la dosis correcta de talento y suerte.
La argentina nacionalizada española llegó al país el sábado para actuar en la Teletón, pero decidió quedarse tres días promocionando su álbum “Soy mujer”.
Ayer por la mañana estuvo en Al Día y durante una amena conversación habló de todo.
Se definió como realista y apegada a la familia, reveló que desea ser madre y que le teme a las alturas.
–Su nombre real es María Laura, ¿cómo le dicen sus familiares y sus amigos?
–En casa me llaman María Laura, mis amigos me dicen Laura. Solo me dicen Chenoa cuando estoy en el escenario.
–¿Chenoa y Laura son personas distintas?
–Totalmente. El único punto en común es que estamos en una sola mujer.
No me gusta mezclar lo personal con lo profesional, soy reacia a hablar de cosas que uno debe tener un poco más en su casa.
–David Bisbal (su pareja) fue el primero del programa Operación Triunfo que llegó a Latinoamérica. ¿Qué le ha dicho sobre el público latino?
–En casa siempre hablamos de cómo nos ha ido. Me habló de Costa Rica... Me dijo que él ya era tico. Pero tampoco le pido muchos detalles, porque me gusta descubrir al público. Yo soy más observadora.
–Sabemos que le teme a la altura, ¿cómo hace para volar?
–No soporto volar, pero lo logro teniendo fe y porque tengo que venir... no que me queda otra (ríe). El susto también depende del nivel de estrés que tenga en el momento, aunque intento llevarlo lo mejor posible.
–¿Es verdad que colecciona zapatos y bolsos?
(Se ríe antes de contestar. Su madre, que está al lado dice “muchísimos”
–Muchos, la verdad me encantan y los fans me regalan muchos.
–¿Cuánto se cuida para lucir bien físicamente?
–Aprendí a estar al tanto de los cuidados, pero por mí, no por la carrera. También gozo de algunos beneficios genéticos que heredé. Mi madre me inculcó el cuidado físico, ella me regaló mi primera crema a los 14 años.
Mi canon de estética no es el anoréxico, lucho contra eso por mis fans (dice esto mientras señala por una ventana a un grupo de seguidoras que se encuentran fuera de Al Día esperándola).
–¿Estudió educación infantil por si no tenía suerte en la música o por exigencia de sus padres?
–Por ambas. Cuando me fui a vivir sola tenía que pagar todo, así que trabajaba por la mañana en una guardería y de noche cantaba. Me especialicé en niños de cero a tres meses y tenía ocho bebés solo para mí.
–Artistas como Enrique Bunbury (exintegrante de Héroes del Silencio) cuestionan el talento de ustedes los cantantes salidos de programas como Operación Triunfo. ¿Qué opina?
–Yo, personalmente, no he recibido críticas, aunque tengo argumentos para callarles la boca. Siempre han existido programas así, y puede ser que cuestionen el formato, eso sí me lo han dicho. Pero muchos de los que critican están luego promocionando sus discos en esos programas. Creo que se debe ser consecuente con lo que se dice.
–¿Con quién le gustaría grabar un dúo?
–Con Mariah Carey o Whitney Houston. En el campo masculino ya cumplí uno de mis sueños, que fue cantar con mi pareja (David Bisbal). Claro que me gustaría hacerlo con un Luis Miguel o un Marc Anthony (dice riendo).
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