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Sin pistas Las autoridades judiciales todavía no tienen a ningún sospechoso de la muerte de Gréttel Brown, quien apareció muerta en el mar, anteayer en Limón. Róger AMORETTY/Al Día
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"Quería ver a su hija en Navidad"
Mujer asesinada en Limón Erick CARVAJAL M, redactor Róger AMORETTY, corresponsal ecarvajal@aldia.co.cr
Gréttel Brown no pudo cumplir su último deseo: ver a su hija María Carla en Navidad.
El cadáver de Brown fue encontrado anteayer flotando en el mar, a unos tres kilómetros del centro de Limón, carretera a Portete, con sus manos amarradas y dos disparos en la cabeza.
La mujer, de apenas 23 años, había conversado con su madre Conchita Briones, quien tiene a su cargo a María Carla.
Nieta y abuela viven en la Barra de Colorado.
"Ella me dijo que deseaba ver a María Carla, que la llevara a Limón, que ella tenía unos regalos para su hija", comentó la madre.
La policía sospecha que se trata de una venganza. Incluso, su compañero sentimental, de apellido Bell, fue indagado por la fiscalía.
El hombre dice que ese día, cuando encontraron el cuerpo de Brown, él se fue a pescar muy temprano pero tuvo que regresar por el mal tiempo.
Dijo a las autoridades policiales que cuando regresó a su casa, no encontró a su esposa ni su escopeta. Estaban sus dos hijos solos. Dolor maternoConchita Briones, madre de Gréttel, pidió justicia a las autoridades.
"Queremos que la persona que cometió este asesinato sea castigada", dijo.
Brown era la menor de tres hermanos y era originaria de la Barra de Colorado.
Se fue a estudiar a San José, pero abandonó los estudios cuando cursaba el segundo año del colegio.
"Amaba a sus hijos, solo pedimos justicia", comentó Conchita.
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