Jueves 24 de junio, 2004. San José, Costa Rica.


 


 

Foto Principal: 749888
Estas son las dos iglesias donde ha trabajado el padre Enrique Vásquez durante su tiempo en fuga. Una es la de St Mary, en New Brittain, Connecticut (izquierda) y la otra es la del pueblo hondureño de Güinope.
Foto Ilustrativa/Al Día

“No busco dinero, busco justicia”

Álvaro SÁNCHEZ CÓRDOBA

Ciudad Quesada.- Las declaraciones que hizo ayer a la prensa hondureña el vicario de Tegucigalpa, Ovidio Rodríguez, sobre la supuesta persecución que es objeto el sacerdote costarricense Enrique Vásquez, acusado de abusos deshonestos en contra de un menor, molestaron e indignaron a la familia de la supuesta víctima, que hoy tiene 24 años.

La madre del menor, Flory Salazar, aseguró ayer en su casa, en Santa Rosa de Pocosol, que “no busco dinero, busco justicia. Que otro niño y otra familia no sufra lo que mi hijo y yo hemos sufrido por toda esta situación. Si él es inocente, como dicen quienes lo protegen, que venga a enfrentar la justicia de Costa Rica, que no huya”.

El vicario hondureño dijo a la prensa de su país que Vásquez, prófugo de la justicia costarricense, estuvo asignado a la parroquia de Güinope, en el departamento de El Paraíso, porque “no hay pruebas en su contra”.

Rodríguez añadió que la acusación contra Vásquez es con el fin de “sacarle dinero al pobre sacerdote”.

Además, mencionó que esta situación pretende desprestigiar al Cardenal Oscar Rodríguez, quien es uno de los candidatos latinos para sustituir al Papa Juan Pablo II.

La madre del joven asegura que no le interesan las pretensiones del Cardenal y mucho menos el dinero del sacerdote.

“Considero un irrespeto y una falta de apoyo a la niñez lo que dicen estos curas. Estamos hablando de una niño que fue abusado (caso en investigación), lo mínimo que pueden hacer es entregarlo a las autoridades”, añadió.

El abogado de la familia, Raúl Muñoz, aseguró que las declaraciones de la jerarquía hondureña son un irrespeto por la investigación que realizan las autoridades judiciales de Costa Rica. “Existe una acusación y un requerimiento del cura, es un prófugo, y dicen que no hay pruebas y que es por dinero y por desprestigiar a una persona”, agregó.

El padre Antonio Quetglas, vicario general de la arquidiócesis de Tegucigalpa, afirmó que todo esto que está sucediendo en contra de obispos y sacerdotes católicos, podría deberse a una campaña mundial que han emprendido los judíos para evitar que el Papa Juan Pablo II pueda referirse a lo que ellos están haciendo en el Medio Oriente en contra del pueblo palestino.

“En el pasado pudo haber equivocaciones, hay que reconocerlas, pedir perdón y punto, pero eso no quiere decir que no debamos seguir adelante. Yo como sacerdote tengo que apoyar a un sacerdote como ustedes apoyarían a un miembro de la prensa si ves que injustamente lo meten a la cárcel”, alegó el cura al diario El Heraldo de Honduras.

Foto Flotante: 749891
Foto Ilustrativa/Al Día
Intentos

El Norte/Al Día publicó el lunes 8 de marzo anterior, precisamente, el día que el sacerdote Vásquez salió de Honduras hacia Estados Unidos, que la familia del menor asegura que el cura y un allegado suyo los llamaron, en varias ocasiones, para que retiraran la denuncia interpuesta en su contra en la Fiscalía de Ciudad Quesada.

En la última de esas llamadas (diciembre del 2002), consta en el expediente judicial 98 -2015110306PE, el sacerdote acordó entregar ¢1 millón a cambio de que el menor firmara un documento, mediante el cual se pretendía archivar el caso.

Sin embargo, los intentos no dieron resultado, pues la denuncia la presentó el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) y la Fiscalía, por medio de la fiscal Alejandra Mahoney, decidió no permitir el archivo de la causa.

Esa última llamada, según relata el menor en su declaración, fue hecha por el sacerdote Vásquez, quien supuestamente ofreció el dinero para “pagar la hipoteca que teníamos de la casa”.

Vásquez está en fuga desde el 4 de diciembre de 1998. Él salió del país un día después de que el PANI interpusiera la denuncia, consta en el expediente 98-2015110306PE por abusos deshonestos en contra del prelado.

Estaría en Honduras

El 8 de marzo anterior, el sacerdote Vásquez comunicó a los feligreses de Güinope su salida.

Él argumentó que su mamá estaba muy enferma en Estados Unidos y que se iba para aquel país, indica una publicación del diario El Heraldo de Honduras.

Asegura la publicación que salió al día siguiente “en compañía de unos 10 sacerdotes que llegaron para llevárselo”.

”No se llevó sus pertenencias sino que las mandó a traer posteriormente”, indica el diario.

Sin embargo, una fuente de la Policía Internacional (INTERPOL), informó que el sacerdote aún estaría escondido por feligreses en algún sitio de Honduras.

Además, se confirmó que lo haría con el alias Luis Enrique Lizano Vásquez y que en el pasado viajó a Estados Unidos pero volvió.

En Connecticut, Estados Unidos, donde estuvo en 1999, Vásquez tiene familiares, según confirmó su hermano, Silverio Menocal, tras ser entrevistado por este medio el martes 16 de marzo, en su casa, en San Ramón.

| PORTADA | NACIONALES | SUCESOS | OPINIÓN | SOCIEDAD | OVACION | EL NORTE |
| INTERNACIONALES | SERVICIOS | USTED OPINA | PURA VIDA | ESCRIBANOS |

© 2003. Periódico Al Día. El contenido de aldia.co.cr no puede ser reproducido, transmitido ni distribuido total o parcialmente sin la autorización previa y por escrito del Periódico Al Día. Si usted necesita mayor información o brindar recomendaciones, escriba a webmaster@aldia.co.cr

EDICIONES ANTERIORES