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La Oficina de la Mujer en San Carlos brinda asesoría y asistencia a las mujeres de la zona que sufren de violencia doméstica.
Archivo/Grupo NaciónAl Día
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Preocupan casos de agresión Marcela DELGADO, corresponsal
Aunque en lo que va del año solo dos mujeres han muerto en la región a manos de sus esposos, las autoridades se muestran preocupadas por la cantidad de denuncias que se presentan.
Según datos de la Fuerza Pública, el promedio de denuncias por mes se mantiene en 100. Solo el mes anterior, la policía atendió 111 casos, igual cantidad que las atendidas en agosto de este año.
Las estadísticas policiales señalan que, en promedio, durante este año se han atendido unos 1.100 casos de violencia doméstica, una cifra superior a la registrada en el 2003, confirmó Arturo Sibaja, coordinador de violencia intrafamiliar de la Fuerza Pública.
El primer caso trágico ocurrido en este año se registró en Veracruz de Pital, el 12 de abril, cuando el esposo de una mujer de apellido Moreno la apuñaleó y le causó la muerte.
El segundo caso se presentó el domingo anterior en San Rafael de Guatuso, donde murió Rebeca Ortega, de 26 años. (Ver nota en página 3)
En ambas situaciones, los sospechosos debía cumplir medidas cautelares, pues arrastraban problemas de violencia intrafamiliar desde años atrás.
“Estamos preocupados, sobre todo porque muchos de los casos que atendemos son reincidencia, aparte que los números no bajan”, agregó Sibaja.
“Es mentira que solo los extranjeros son los protagonistas, además tampoco podemos hablar que se trata solo de personas de bajos recursos, nos hemos dado cuenta que el problema no hace distinciones”, señaló el coordinador.
Añadió que más del 50 por ciento de los casos tienen ya medidas cautelares.
Además dijo que un porcentaje importante es protagonizado por mujeres, es decir, que las esposas o compañeras son las que agraden a sus parejas. “Es preocupante”La Oficina de la Mujer de San Carlos promueve talleres y programas de apoyo para las mujeres de la zona.
Desde hace varios años, esta oficina trabaja seriamente en prevención y atención de casos de violencia intrafamiliar.
La coordinadora de la oficina en San Carlos, Magally Rojas, aseveró que “nos preocupa que el caso registrado en Guatuso sea el segundo, y más aún que el número de casos que atendimos en lo que va del año, ya sea igual a los que atendimos todo el año pasado”.
Según las estadísticas de la Oficina de la Mujer, entre enero y setiembre de este año, se presentaron 139 casos de violencia en la región.
Rojas resaltó que la cifra es igual al número de casos con los que cerraron el 2003.
La psicóloga agregó que 165 mujeres llegaron durante este año a su oficina para consultar sobre situaciones de violencia, aunque no precisamente sean las mismas mujeres agredidas las interesadas en consultar.
Por su parte, el Departamento de Trabajo Social del Hospital de San Carlos junto a la Red contra la Violencia Intrafamiliar de la región promueve sus propios talleres y capacitación a mujeres agredidas.
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Lázaro Girón afirmó ayer que con la muerte de su madre, en Veracruz de Pital, le arrebataron la mitad de su vida.
Alexánder OTÁROLA/Al Día
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“No se lo deseo a nadie” Marcela DELGADO, corresponsal
Pital.- Han pasado cinco meses exactos, desde aquel 12 de abril en el que la mañana trajo muy malas noticias para la familia Girón Moreno, en Veracruz de Pital.
Ese día, un hombre de apellido Girón habría matado a su propia esposa, de apellido Moreno, tras discutir con ella en su casa.
La mujer murió a causa de al menos tres puñalas en diferentes partes de su cuerpo.
“Vergonzosamente tengo que decir que es mi padre, no lo he podido perdonar, pero es mi papá y aún lo quiero”, dijo Lázaro Girón, hijo de la víctima.
Girón nos atendió en la empacadora en la que trabaja en Pital, donde contó que desde el día del homicidio no volvió a saber de su padre.
“Yo prefiero verlo en la cárcel, no me importa, de todas formas él tiene que pagar por lo que hizo, y temo por él porque mis hermanos y mi familia lo buscan en Nicaragua para matarlo”, agregó.
La investigación sobre este caso continúa, y todo apunta a que Girón se encuentra en Ciudad Sandino, en Nicaragua.
Para Lázaro y sus siete hermanos estos cinco meses han sido una prueba de vida. “Cuando a uno le quitan la mamá le quitan la mitad de la vida, ha sido muy duro y esto no se lo deseo a nadie”, añadió este hombre de 28 años.
Y es que fue él, quien la madrugada de ese día encontró el cuerpo de su mamá, boca abajo, entre la cocina y la sala de su casa.
Al ver las noticias sobre el caso en Guatuso, esta familia nicaragüense revivió su dolor.
Desde hacía años, la mujer era víctima de agresión por parte de su compañero y su hijo cree que la causa del homicidio fueron celos infundados.
“Más de una vez yo le dije a mi mamá que se fuera a mi casa, yo quería sacarla de ahí, pero mi papá la convenció, le pidió perdón y ella le creyó”, concluyó.
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