|
Raspando Saprissa triunfó ayer 1-0 en la cancha del Estelí de Nicaragua, por el torneo UNCAF, en el juego de ida. Cristian Bolaños se fajó en la mediacancha. Cortesía Nuevo Diario de Nicaragua/Al Día
|
Triunfo raquítico
Morados vencieron 1 a 0 en Nicaragua y se quejaron de la cancha Milton MONTENEGRO mimontenegro@aldia.co.cr
Dejando los pelos en el alambre, como decían nuestros abuelos, así ganó Saprissa ayer en Nicaragua, donde venció 1 por 0 al Real Estelí.
El juego marcó el debut de los nacionales en los cuartos de final del Torneo Uncaf.
Saprissa jugó con F.González, J.Drummond, V.Cordero, G.Badilla, J.P.Fonseca, J.F.Alfaro, C.Bolaños, S.Philips, R.González (W.Muñoz al 65), E.Benwell (A.Sequeira al 80) y V.Cordero (A.Saborío al 55).
Aparte que el triunfo fue raquítico, los morados lo consiguieron desde el punto de penal. Rónald González marcó a los 52 minutos, luego de que el árbitro hondureño Marcio Carranza, señalara una falta contra el joven delantero Víctor Cordero.
En su campo el Estelí se ha convertido en un cuadro muy complicado para Saprissa, que el año pasado también lo derrotó por el mismo marcador.
En transmisión que efectuó Radio Columbia, Hernán Medford, técnico de los capitalinos, se mostró tranquilo por el resultado, pero igual que varios jugadores, se quejó del estado del terreno de juego.
“En el primer tiempo ninguno de los dos conjuntos jugó bien, pero en el segundo, Saprissa demostró porqué es el campeón de Costa Rica y subcampeón de CONCACAF”. Nada fácilPese al 1 - 0, Medford evidenció estar satisfecho, seguro de que en el compromiso de vuelta, el miércoles de la otra semana, las cosas serán distintas.
“El objetivo era ganar, pero en la cancha que actuamos no se puede hacer fútbol. Propusimos, porque esa es nuestra consigna, pero no fue fácil porque el Estelí se defiende bien”.
Rónald González comentó: “la cancha no ayudó y eso será diferente en el Saprissa, donde el campo es bueno y beneficiará a los dos, aunque a nosotros más porque lo conocemos bien”.
Respecto al gol, González añadió: “Gracias a Dios se dio el penal, pero en la zona de lanzamiento había un hueco grande y la bola no quedaba quieta. Para asegurar, le pegué fuerte”.
|