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Tribunal
El Tribunal de Juicio de San José estuvo integrado, en el orden usual, por los jueces Carlos Chaves, Linda Casas y Ana Patricia Araya.
Manuel VEGA/Al Día
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A prisión 30 años
Muerte de niña de 8 meses Rodolfo MARTÍN
rmartin@aldia.co.cr
A 30 años de prisión fue sentenciado ayer Gerardo Soto Barquero luego de que el Tribunal de Juicio de San José lo encontró culpable del delito de homicidio calificado en contra de una niña de 8 meses.
La chiquita, hija de Ana Lillian Pérez Campos, esposa de Soto, y a quien nunca reconoció, murió el 22 de octubre del año pasado en el Hospital Nacional de Niños, víctima del “síndrome de la sacudida” y después de tres días de agonía.
El fiscal Héctor Chacón Chan, durante unas conclusiones llenas de vehemencia, dijo que la niña murió producto de la grave hemorragia interna que sufrió debido a los los golpes que recibió su masa encefálica al golpearse una y otra vez contra los huesos del cráneo.
Sin embargo, aclaró que la menor era maltratada desde que nació.
A Soto le molestaba que la niña llorara y por esto la golpeaba. Sin embargo, la bebé lo hacía porque la alimentación que le daban era insuficiente.
El sentenciado, de acuerdo con lo que trascendió en el debate, se encargaba de que no le suministran la cantidad idónea.
Carlos Breedy, el defensor, alegó un homicidio especialmente atenuado porque su representado nunca quiso matar a la niña.
Sin embargo, Linda Casas, presidenta del Tribunal, aclaró que era homicidio calificado con base en el análisis del resumen de las pruebas aportadas por las declaraciones de un hermano de la niña, dos oficiales de la Fuerza Pública que llegaron al sitio el día del suceso, una llamada que entró al 911, las declaraciones de dos médicos, uno del Hospital de Niños y el otro de la Medicatura Forense.
Además, porque comprobaron que había sido agredida por un largo tiempo.
Una de estas agresiones, de tipo “pasivo”fue el evidente estado de desnutrición que tenía la chiquita.
Soto alegó que las lesiones se debieron a que él cayó encima de la niña, pero las lesiones no son compatibles con tal supuesto hecho.
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