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Reclamo
Hugo Chávez comparecía ayer ante los diputados en Caracas y reclamó a Colombia por el caso del colombiano Rodrigo Granda. En Bogotá, Álvaro Uribe dirigía un Consejo de Ministros.
AFP/Al Día
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Fuerte tensión Colombia-Venezuela
Caso de "El Canciller" sacude nexos
Caracas/AFP. El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, exigió ayer a su homólogo de Colombia, Álvaro Uribe, rectificar públicamente la versión de Bogotá sobre la captura del jefe de las FARC, Rodrigo Granda, y anunció la suspensión de los negocios bilaterales hasta tanto ello no ocurra.
"He ordenado paralizar los acuerdos y todo negocio con Colombia. Se paraliza el gasoducto transcaribeño, lamentablemente, pero hasta que no sea reivindicada la soberanía violada de Venezuela, yo me veo obligado a tomar estas decisiones", dijo Chávez en un discurso ante la Asamblea Nacional.
Añadió que su embajador en Colombia, Carlos Santiago, a quien previamente llamó a consultas, no regresará hasta tanto Uribe no rectifique y ofrezca disculpas.
"Nada ni nadie me hará salir de esta posición porque represento la dignidad del pueblo de Venezuela", remarcó Chávez, quien aclaró que no cree que Uribe hubiera estado al tanto de la operación, según él, planeada por la policía colombiana para secuestrar a Granda en Caracas tras sobornar a militares venezolanos.
"No creo que usted haya sabido de esta operación que ha violado flagrantemente la soberanía del pueblo venezolano y que rechazamos categóricamente. Le invito a rectificar públicamente, le invito a que su gobierno rectifique públicamente", afirmó.
Chávez manifestó que "no puede ser, es injustificable desde cualquier punto de vista, que altos funcionarios del Estado y del gobierno colombiano estén instigando a funcionarios venezolanos al delito, que estén sobornando a funcionarios venezolanos". Granda, quien es conocido como "El Canciller" de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), fue detenido el 13 de diciembre anterior en la ciudad colombiana de Cúcuta, 550 kilómetros al noreste de Bogotá y fronteriza con Venezuela, según la policía colombiana.
Pero el gobierno de Chávez sostiene que Granda fue secuestrado en Caracas por militares venezolanos en coordinación con policías colombianos, y desde allí llevado a la frontera, lo cual denuncia como una grave violación a la soberanía venezolana.
Colombia admitió que pagó una millonaria recompensa a quienes permitieron que Granda fuera entregado en Cúcuta, pero negó que sus autoridades violaran suelo venezolano.
Inquietud colombiana
Bogotá/AP. Varios sectores colombianos recibieron con inquietud la noticia sobre la suspensión de acuerdos comerciales firmados entre Colombia y Venezuela.
"Este es el peor momento de las relaciones diplomáticas entre los dos países en mucho tiempo", advirtió Alfredo Rangel, director de la Fundación para la Seguridad y la Democracia, en Bogotá.
El expresidente Ernesto Samper afirmó que un problema político no debería afectar el sustento de miles de personas de ambos lados de la frontera y vaticinó que vendrá un diálogo de alto nivel.
"Hay una especie de código de honor para no afectar las relaciones económicas, como son inversiones y comerciales, a menos de que ya se llegue a una situación de ruptura que no tenga paso hacia atrás", adujo Samper.
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