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Feliz con la cajita
Aunque se le obligó a devolver la membresía de un lujoso complejo en el Caribe, el Presidente se mostró feliz ayer en Zapote de que se le permitiera conservar la cajita que le regaló Bush. Dijo que es un gran "recuerdo". Lo acompañó Lineth Saborío, Vicepresidenta.
Presidencia para/Al Día
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Pacheco regañado, debe devolver regalos
Presidente reconoce error y ofrece disculpas Pablo GUERÉN CATEPILLÁN
pgueren@aldia.co.cr
Definitivo. El presidente Abel Pacheco no podrá degustar ni la sopa de mondongo, ni la cerveza que él mismo señaló hace una semana, podría algún día disfrutar en medio de los hermosos parajes del Cap Cana, en República Dominica, el más lujoso complejo del Caribe.
Y es que el auditor interno de la Casa Presidencial, Herberth Villavicencio, envió una carta a Pacheco, en la que le ordena devolver la membresía de por vida que le fue regalada por los copropietarios del Cap Cana, los multimillonarios de la familia Hazoury, el sábado 14 de mayo, tal como lo reveló Al Día.
"En cuanto a la Membresía otorgada por el Centro Turístico Cap Cana, tanto a usted como a la Primera Dama doña Leila Rodríguez de Pacheco, en razón de la cual se le emitieron dos tarjetas a nombre de ambos, respetuosamente le indico que deben ser devueltas.
Es un distingo intransferible y de ningún beneficio para el Estado", dice en su misiva Villavicencio.
No es todo. El auditor también regañó a Pacheco por haber aceptado que se le brindara el transporte aéreo para trasladarse desde Estados Unidos a Dominicana, y luego desde esa isla a San José.
"Le indico que ese tipo de situaciones no deben darse, en apego a la sana práctica administrativa y en pro de una política de transparencia.
El detalle de toda visita debe publicarse en el diario oficial y debe corresponder a visitas oficiales debidamente autorizadas y comunicadas (.)", subrayó el auditor.
"Pensar en devolver los costos de los pasajes de avión no tiene sentido porque no fue el Estado el que sufragó ese gasto", añadió.
Pacheco se vio obligado a enviar el jueves todos sus regalos al auditor, luego de que varios diputados señalaron que el mandatario podría haber transgredido la Ley contra la Corrupción y Enriquecimiento Ilícito.
Esa Ley entró a regir en octubre del 2004, fue firmada por Pacheco y prohíbe a los funcionarios públicos recibir obsequios. PajaritaTras el Consejo de Gobierno, Pacheco, reconoció su error.
"No estuvo bien. Bueno, a todos a veces se nos va la pajarita. Yo pensé, bueno, si me he montado en el avión de (el presidente mexicano, Vicente) Fox, y de Álvaro Uribe (mandatario de Colombia), y de tanta gente para ir de aquí e ir allá, por qué no esto. Pero sí, está mal hecho, lo reconozco y pido disculpas", dijo visiblemente nervioso y sin parar de beber agua al leer a la prensa la carta del auditor.
Hace solo una semana, cuando Al Día reveló el regalo de la membresía, Pacheco se molestó ante una serie de consultas de este medio y negó que fuera imprudente aceptar la membresía, y consideró "patriótica" su invitación a los Hazoury para invertir en suelo tico.
Pero ayer, tras las disculpas, Pacheco confirmó el inmediato envío de una carta a Víctor Cabral, presidente ejecutivo del Cap Cana, en la que devuelve las membresías "en aras de evitar ulteriores suspicacias".
La cajita de Bush
Pero no todo fue tristeza ayer para el presidente Abel Pacheco.
Lo que según el auditor Herberth Villavicencio sí podrá conservar el mandatario es la cajita de recuerdo que le regaló su homólogo de Estados Unidos, George W. Bush, en su reciente visita a Washington D.C.
Y es que, según Villavicencio, en internet es posible encontrar modelos similares al de esa caja, cuyos precios oscilan entre los $135 (¢64 mil) y $375 (¢177.750), lo que "no alcanza" a un salario base, por lo que "no puede considerase un bien propiedad de la Nación".
El artículo 20 de la Ley contra la corrupción señala que: "Los obsequios recibidos por un funcionario público como gesto de cortesía o costumbre diplomática, serán considerados bienes propiedad de la Nación, cuando su valor sea superior a un salario base (...)".
Pacheco se mostró feliz con la noticia, dijo que la cajita es "muy bonita", pero que ciertamente "no es el tesoro de la Isla del Coco".
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