Testigo de cambio

A volar...

¿Que Chomes de Puntarenas fue el primer aeropuerto internacional?

Esto tiene su explicación: los pilotos de la empresa Panamerican preferían ese lugar por temor a las montañas. Los viajeros llegaban en tren al Puerto y de allí se iban en lancha hasta Chomes.

Luego, se habilitó un aeropuerto en la hacienda La Lindora, del “rey” del café, Florentino Castro. Allí estuvo el famoso actor Clark Gable, pero solamente en una especie de parada “de bandera”, pocas horas.

Fue en la administración de don León Cortés (1936-1940) cuando, oficialmente, La Sabana se convirtió en aeropuerto internacional con un edificio apropiado y hermoso, hoy sede del Museo de Arte Costarricense.

En La Sabana estuvo de visita un héroe: Charles Lindbergh, el primer aviador que cruzó el Atlántico, en vuelo sin escalas entre Nueva York y París, en 1927.

Nunca se había visto tanta gente que quería ver de cerca al monoplano “Espirit of St. Louis” y a su célebre piloto. Otra visita famosa fue la del presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy, en 1963.

Lo más bonito y más tico era despedir o recibir a los viajeros desde el balcón del edificio. Pañuelos, lágrimas y emoción a raudales cuando los pasajeros nacionales aplaudían al tocar tierra el avión. Tiquicia legítima y querida.

La Sabana es hoy un hermoso lugar, poblado de árboles, canchas y con un estadio que nadie entiende por qué no se utiliza con frecuencia. Lástima una sola cosa: que en vez de eucaliptos australianos, a los turistas no los reciba un bosque con nuestras más de 200 especies de árboles. Pero, ¡idiay!, así es la cosa.