Padre de una de las víctimas en asalto bancario, en Monteverde

“Daría el triple por mi hijo”

Indemnización no devuelve a seres queridos, comenta

Monteverde y Esparza. - “Yo daría el triple de lo que me dan para recuperar a mi hijo”.

Con voz entrecortada y paso lento, Fernando González recordó ayer a su hijo Juan Pablo, luego de conocer la decisión de la Sala III que ordena al Banco Nacional y Seguridad Delta a indemnizar a las víctimas del sangriento asalto bancario, el 8 de marzo del 2005 en Monteverde, Puntarenas.

Al igual que don Fernando, otras siete familias perdieron esa fatídica tarde a uno de los suyos.

El monto total de las indemnizaciones ronda los ¢400 millones.

“Anteriormente supe que recibiríamos ¢20 millones por daños morales, pero de ahí a otra cosa más, no sabía”, comentó don Fernando, quien es un alto dirigente deportivo de Esparza.

Kilómetros más al norte, en Monteverde, Juvenal Marchena, ahora como maestro pensionado, se encarga de la crianza de su nieta Celeste, quien quedó sin su mamá, Rosita Marchena. La niña, con 7 años, cursa el primer grado en la escuela bilingüe de esa comunidad puntarenense.

“Lo importante siempre será nuestra hija y en el caso de las indemnizaciones nos toma por sorpresa ya que creíamos que todo estaba olvidado; pero esta plata será para dedicársela a Celeste, porque lo tomamos como el dinero que mensualmente nuestra hija ganaba para dárselo a nuestra nieta”, narró Marchena.

González, por su parte, fue más allá y aseguró que “el fallo crea jurisprudencia y que las instituciones deben preocuparse por darle una efectiva seguridad a su personal en donde laboren”.

Agregó que “se le permite a los trabajadores de este país contar con un nuevo sistema de seguridad laboral, porque a como está la ley sólo la póliza de trabajo. Prácticamente hay una desprotección increíble a los trabajadores”.

Ambos padres coincidieron en que a pesar del fallo nadie les devolverá a sus seres queridos que perdieron la vida.

El Tribunal de Juicio de Puntarenas había dictaminado que tanto el Banco Nacional como Segurida Delta no debían indemnizar.