Ericka Rojas Rodríguez
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Pancartas de apoyo en la gradería y su nombre coreado por la afición. Hernán Medford se encontró anoche nuevamente con los aficionados, en un juego que, para su fortuna y la de todo un país, ganó el combinado nacional para seguir vivos en el proceso rumbo al Mundial.
Atrás quedó la difícil semana para el entrenador, al menos por anoche, donde el estratega hasta pudo escuchar el “Medford, Medford” que cantaba la afición, que se puso la roja y casi llenó el estadio tibaseño.
Minutos antes del juego, jugadores y cuerpo técnico ingresaron a la cancha. Medford salió a la gramilla pegándose en el pecho lleno de valentía y agradeciendo a los seguidores de la nacional su presencia en la “Cueva”, y el apoyo a su persona.
Definitivamente el pueblo costarricense quiere a la “Sele” en el Mundial y al parecer al extécnico morado en ella, al menos así lo demostraron ayer.
Iniciado el juego ante los caribeños, Hernán, como siempre, estuvo atento a todas las jugadas y en especial en las que culminaron con el movimiento de redes.
Primero fue Álvaro Saborío quien anotó y corrió al banquillo nacional a celebrar la apertura en el marcador. “Sabo” chocó cabeza con Medford, mientras se decían algo. Más tarde lo hizo Bryan Ruiz, con quien el técnico también celebró el gol.
El encuentro dejó de agradar a la afición y ésta se hizo sentir con silbidos en el segundo tiempo, cuando las acciones frente del marco se fallaban.
Hernán empezó a gesticular, a mandar indicaciones y a lamentarse por esos fallos, pero en el último minuto Rándall Azofeifa le devolvió la alegría, que apagaron los abucheos.
Hernán y su equipo salieron aplaudidos tras superar la serie.
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