Alexander Aguilar
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En la Selección de Costa Rica se toman lo que viene de Honduras como oír llover.

Las ofensas de la prensa, lo caliente que está la afición y lo que haga el equipo catracho no es tema de desvelo para los jugadores ticos.

Los futbolistas nacionales tampoco le dan bola a las palabras que mencionó en una columna el periodista hondureño Óscar Flores, quien dijo: “No estaría mal que en lugar de su bandera, les pongan la de Botswana. Y nada de Himno Nacional (de Costa Rica). Es mejor un reggaetón”.

“Hagan ruido o no, solo haremos lo nuestro para ratificar el primer lugar de la eliminatoria”, señala el volante tricolor Esteban Granados. “Que se piquen ellos, nosotros no tenemos por qué hacerlo”, agrega.

Su compañero Armando Alonso también lo vive con total tranquilidad. Sabe lo que se toparán en Honduras, pero no se inquieta. Él y el resto de la “Sele” se enfrasca en su trabajo y si bien se entera de lo que dicen allá, no le presta atención a las frases punzantes de los medios televisivos, radiales o escritos de Honduras, que inevitablemente repercuten en nuestro país.

“Es bonito jugar cuando la gente está en contra de uno, es mejor así. Pero estamos tranquilos con todo eso, sabemos lo que hay que hacer y será una presión igual a los demás partidos”, destaca Alonso.

“Nosotros vamos a jugar fútbol, la gente de afuera puede decir y hacer muchas cosas, pero iremos a lo nuestro. En la cancha es donde se demuestran las cosas”, añade el volante saprissista, mientras Granados trata de poner las cosas en su debido lugar.

“El fútbol hondureño se deja llevar mucho por las emociones y lo que están haciendo es picar a la afición, para que sea un partido mucho más caliente de lo que ya es”, el próximo día 12.

La Selección tica llegará a San Pedro Sula el lunes 10 de agosto y el 11 reconocerá la gramilla del estadio Metropolitano.