1. Falta jerarquía. Costa Rica tiene una Selección sin fortaleza internacional como para ir a buscar una gesta al mítico estadio Centenario. No hay jugadores con gallardía para imponerse a un escenario y a un marcador que jugarán en contra.

2. Poco versátiles. Los futbolistas de la Tricolor no tienen la capacidad para adaptarse a los diferentes estilos de juego. Por ejemplo, Uruguay golpeó demasiado el sábado, pero la “Sele” no encontró el “remedio” para contrarrestar ese juego del rival.

3. Falta peso. Aparte de Bryan Ruiz, ¿quién más para asumir la manija de esta Selección a la deriva? Centeno lleno de altibajos, Celso impredecible, Bolaños sin regularidad, Saborío solo contra el mundo, Fonseca ya en las últimas...

4. El gol en contra. Uruguay ya hizo daño en Costa Rica y solo le bastará un empate para alcanzar el boleto a Sudáfrica 2010. La derrota en casa dejó a Costa Rica con todo en contra de cara a su visita del miércoles a Montevideo.

5. De visita sin luz. Actuando en casa ajena Costa Rica no ha sido contundente en la eliminatoria. En la hexagonal jugó cinco veces afuera, perdió tres, ganó uno y empató uno. En las últimas tres visitas solo anotó dos goles, a Estados Unidos.

6. Estilo de juego. ¿A qué juega la Selección de Costa Rica? ¿Cuál es su estilo defensivo y ofensivo? Esta Tricolor no tiene identidad futbolística y resulta difícil pensar que con las características que presenta vaya a hacer una hombrada.

7. Sin pegada. ¿Cuál es el referente goleador de esta Selección? La respuesta es muy fácil de encontrar: ninguno. Costa Rica no tiene hombre gol, como en su momento lo fueron Wanchope o Fonseca. Sus carencias ofensivas son notables.

8. Habilitados. Los uruguayos Martín Cáceres (Juventus, Italia), Andrés Scotti (Argentinos Juniros, Argentina) y Maximiliano Pereira (Benfica, Portugal) están listos para jugar pasado mañana, luego de cumplir un juego de sanción.

9. Presión en contra. En el segundo partido del repechaje los charrúas, eso sí, tendrán que cargar con la presión de un estadio Centenario a reventar, la cual no han podido manejar a favor en la mayoría de partidos de su eliminatoria en el Sur.

10. Alguna esperanza. La “Sele” jugará contra un Uruguay que en su casa no ha sido contundente. En los nueve partidos de la eliminatoria sudamericana ganó cuatro, empató tres y perdió dos. En casa tuvo un rendimiento del 56%.