Miguel Calderón Suárez y Julio Segura, corresponsal GN
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Guanacaste. - Dos sujetos armados ejecutaron de un balazo antenoche al conductor de un camión repartidor e hirieron al ayudante tras un bajonazo ocurrido en la comunidad del Níspero de Porozal en Cañas, Guanacaste.

El hecho se registró pasadas las 6:30 p.m. 50 metros oeste de la escuela de El Níspero. La víctima fue identificada por las autoridades judiciales como Donald Muñoz Cordero, vecino de Tilarán.

Según informó la Fuerza Pública de Cañas, los repartidores ya estaban finalizando su recorrido por la zona luego de entregar mercadería en Nicoya y otros sectores de la provincia.

Su labor terminaba al entregar la mercancía en la pulpería conocida como El Níspero.

Tras una larga e intensa jornada, Muñoz, así como su ayudante, se subieron al camión repartidor para ir a Tilarán.

Félix Lizano, subdirector policial, comentó que los dos asaltantes salieron de un cerro montañoso, interceptaron a los hombres y con pistola en mano, obligaron al conductor a salir por la fuerza. Muñoz recibió un impacto de bala en la parte trasera de la cabeza. Al llegar al lugar, los cruzrojistas de Colorado lo declararon fallecido. El cuerpo quedó tendido en el suelo, cerca del camión y de la pulpería.

También su ayudante fue obligado a bajar. A él lo agarraron a patadas y lo amenazaron de muerte si movía un solo dedo.

Los desconocidos, después de cometer el asalto, huyeron sobre el mismo cerro y hacia la montaña donde estaban escondidos.

Según las autoridades y algunos testigos, se presume que abordaron una lancha y escaparon sobre las aguas del río Tempisque con rumbo a Nicoya.

El levantamiento del cuerpo se realizó a eso de las 11 p.m.

Por el momento se desconoce el paradero de los homicidas.

El caso está bajo indagación por el Organismo de Investigación Judicial de Cañas.

El camión pertenece a un almacén distribuidor de abarrotes de Tilarán, el cual se desplazaba por diferentes partes de Guanacaste. El chofer fallecido era vecino de Tilarán y vivía en Las Parcelas de Monseñor. Era casado, dejó cinco hijos y a su esposa.

Aparentemente, la víctima tenía dentro de la bolsa de su pantalón unos ¢750 mil colones. Los sujetos no pudieron llevárselos.

Según la Policía, los maleantes no lograron robar nada, solo liquidaron al chofer dejando mucha tristeza entre sus compañeros y los vecinos, quienes se mostraron consternados con lo sucedido, pues aseguraron que en la comunidad del Níspero, “nunca había pasado algo así”.