Isaac Lobo
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Ama tanto a la cocina que en sus recetas se refleja el amor, el cual se ha convertido en su ingrediente secreto. Doña Doris Goldgewicht es la popular chef que está en toda lado gracias al anuncio de “Tómese su lechita”.

Desde que tiene memoria estuvo rodeada de ollas, harina y cucharas, pues su abuela y su nana “Ata” le inculcaron el cariño por la gastronomía.

Psicóloga de profesión, aprendió que la vida es como una receta, aunque no quede como un esperaba, siempre se puede arreglar.

¿Cuántos libros de cocina tiene?

Son miles, nunca copio las recetas, las agarro como guía y les pongo mi sello.

¿Cuál ha sido su éxito?

Hacer recetas prácticas, fáciles y no muy caras.

¿Cómo es Doris?

Tengo mucha energía, siempre he practicado ejercicio. Gracias a esto superé la pérdida de mi mamá, la de mi esposo y la de una nietita.

¿Qué alegrías le ha dado?

Que me conoce Raymundo y todo el mundo. Me ilusiona que la gente me diga que hizo una receta mía. Amo tanto esto que se refleja. Me puedo orinar de la emoción al meter las manos en la harina.

¿Cómo es hacer una receta?

Es como cuando un cantante compone una canción o un escritor hace una poesía.

¿De cuál anuncio suyo se acuerda más la gente?

El de Dos Pinos, el de “Tómese su lechita”. Yo estoy en un grupo de caminata y un día llegamos a un pueblo alejado, sólo había una cantina y me dijeron “¿Se tomó la lechita?” y yo les dije “Sí, pero mejor deme guaro”.

Además de la cebolla, ¿qué la hace llorar?

Todo, soy súper romántica. Me emociona el abrazo de la gente.

¿La receta favorita?

El gallo pinto. Cuando estoy triste me lo preparo.

¿La más difícil?

Deshuesar un pavo.

Si fuera un platillo, ¿cual sería?

Un bistec encebollado, con mucho jugo por dentro y buena salsa Lizano.

¿Panza llena corazón contento?

Sí, definitivamente, más que glotona, satisfecha.

¿Un olor que ame?

La vainilla y la canela. En todos los recuerdos más felices de mi vida siempre han estado presentes esos olores.