Kimberly Chaves, quien es una de las modelos más cotizadas del país, no puede pedirle más a Santa, pues asegura que termina un gran año en su vida.
Por esa razón, tiene todo listo para marcharse junto a su hijo de 8 años a Orotina, donde disfrutará junto a toda su familia de la Navidad.
“Soy buena cocinera y en esta época hacemos los tamales entre mi mamá, mi abuelita y yo. Esta semana es para estar con ellos, por eso trato de no trabajar”.
La curvilínea morena dice que ella es de ir a posadas y escuchar villancicos junto a su pequeño.
“Siempre esperamos la media noche para abrir regalos”.
La próxima semana tomará el camino a Playa Conchal, donde decidió que recibirían el año nuevo, pues quiere disfrutar del sol.
Su plan es regresar en la primera semana de enero a San José para continúar su trabajo en donde luce su nueva sonrisa, ya que tras dos años le quitaron los frenillos. Dice que le han piropeado más la sonrisa y ella se siente mucho más segura.
Sigue con el corazón en la mano
“Peke” pasará la Navidad bien acompañada