Fabio Parreaguirre, colaborador
redaccion@aldia.co.cr

         

Tal y como lo confirman varios usuarios “hablar por teléfono” provocó que el chofer de la ruta a Desamparados de apellido Agüero, no escuchara que se aproximaba el tren colisionando con éste el jueves pasado.

Ayer, ya dos de los cuarenta y cinco pasajeros que resultaron heridos interpusieron la denuncia de delitos culposos en la Unidad Especializada de Delitos contra la Vida del Ministerio Público. En principio, dichas denuncias se establecieron contra Auto Transportes Desamparados, la empresa dueña del bus accidentado.

Se intentó hablar con el señor Ronald Ureña, gerente general de esta empresa autobusera, pero no devolvió la llamada en tres ocasiones cuando le dejamos el recado con su secretaria.

Por su parte, Eduardo Vargas, una de los usuarios que estaba dentro del bus al momento del accidente, nos dijo por teléfono que la empresa se hizo cargo de llevarlo al hospital del Instituto Nacional de Seguros, pero que solo lo dejaron ahí y no le devolvieron a su hogar por lo que estaba muy molesto con ellos.

“Ahora tengo que esperar que me realicen pruebas por los golpes en la cabeza. Y esperar la indemnización que le tiene que pagar el INS”, comentó Vargas quien tiene 80 años.

Además, Grace Arias, otra de las personas que vivió el accidente como usuaria del bus, nos indicó que ella está pensando en demandar, “ya que el susto y la negligencia son muy fuertes”.

La Ley de Tránsito indica en su artículo 131, inciso E, que por la conducta de conducir y hablar por teléfono a la vez, se debe penar a los conductores con una multa. La misma hoy es de ¢312 mil, más el 30 por ciento del Patronato Nacional de la Infancia.

En la Dirección de Tránsito nos indicaron que desde que se cambió la ley en marzo del año pasado, se han confeccionado a la fecha 273 boletas a conductores de transporte público, entre autobuseros y taxistas, que van hablando por teléfono.

“Siempre se realizan operativos en varios puntos del país donde se buscan personas que infrinjan este artículo o el uso del cinturón de seguridad. Ambos son requisitos absolutos para cualquier chofer de bus, sea público o no”, explicó César Quirós, director de la Policía de Tránsito.

“Respecto a las zonas donde las calles se intersectan con la ruta del tren, todas están bien señalizadas. El problema es que los choferes no están atentos o se juegan el chance y se lanzan”, indicó el titular de Tránsito.

Según la empresa de la ruta a Pavas, ellos tienen prohibido a sus choferes el uso del celular.

“Ni siquiera con los dispositivos de manos libres. Para eso tienen su tiempo libre en la terminal”, indicó un encargado.