Martes 29 de noviembre de 2011, Costa Rica

Las Estrellas Arrasadoras

Un futuro prometedor

Rodolfo Rodríguez L.

rodolfo.rodriguez@aldia.co.cr

Con una notable alegría, una sonrisa de oreja a oreja y una gran ilusión, después de 13 semanas de esfuerzo para lograr el triunfo, Las Estrellas Arrasadoras recibieron su merecida recompensa.

A la caza de los ganadores, en pleno jardín del programa “Buen Día”, ayer los talentosos niños dieron detalle de cómo disfrutarán de su premio.

“Yo quiero un montón de juguetes”, se adelantó en la respuesta la capitana Claudia Martínez de apenas cuatro años y vecina de Moravia.

“Aprendimos ha ser amigos, me siento muy bien, quiero irme con todos ellos a comer”, agregó la pequeña.

Lo dieron todo en el escenario, atesorando la experiencia vivida, los mayores del equipo analizaron la victoria.

“Tenemos algo que no tuvieron los demás, fue el empeño que pusimos y el esfuerzo que tuvimos durante todo el programa”, comentó el cantante José Ortega quien desde hace dos años interpreta y lo contratan para dar serenatas.

Por su parte, el trabajo brillante de los bailarines, Sofía Mora y Carlos Walters, ayudaron a mantener la estabilidad del equipo y así llegar a la final sin haber sido sentenciados.

“Sí, teníamos en mente que podíamos ganar, pero nunca lo imaginamos”, citó Walters, quien recibió la visita de su abuelita panameña, por eso la bandera al final.

Sofía describió el momento como único, la emoción fue tanta que las lágrimas fueron incontenibles. “Se sintió una energía inmensa, lo que quiero es seguir bailando”, dijo con una gran sonrisa la vecina de Alajuela.

También son ganadores

Pero sumado al gran talento de los niños, la clave del éxito también estuvo en la unión de los padres que los apoyaron de principio a fin.

“Yo estuve en operación hormiga, de casa en casa repartiendo volantes para pedir votos”, comentó Virginia González, abuelita del simpático bailarín Carlos.

El carisma de Claudia sin duda conmovió a muchos, cuando pedía los votos del público, que al final fueron los que decidieron.

Eilyn Vargas, mamá de la capitana de Las Estrellas Arrasadoras aceptó sorprenderse, pues cuando llegaron a las audiciones eran la número 39, llevándola sin ninguna expectativa.

“Siempre ha tenido esa personalidad espontánea y desde que vio el anuncio me dijo que quería venir, en la audición ella hizo de todo, pero para actuar resultó ser magnífica”, contó orgullosa la progenitora.

Carlos Mora acostumbraba a ver junto a su hija Sofía el programa de México, sumado a la sangre de bailarina de uno de sus tíos quien tiene una academia de danza, no lo pensó dos veces hasta lograr entrar al programa.

“Al principio se resintió conmigo porque yo le dije que a lo mejor no, porque iban a llegar niños de muy alto nivel, pero después nos convenció y Dios sabe por qué hace las cosas. Yo ahorita estoy sin trabajo y eso fue determinante para que ella pudiera venir y yo acompañarla”, comentó.