Washington/EFE.- Sultan Kosen, que con una estatura de 3,2 metros es el hombre más alto del mundo, ha dejado de crecer después de someterse a un tratamiento para ello, informó ayer el Centro Médico de la Universidad de Virginia (UVA).
Kosen, ciudadano turco y quien figura en el Libro Guinness de Récords como el humano de mayor altura, visitó por primera vez la universidad en Charlottsville, Virginia, en mayo de 2010 para iniciar el tratamiento de la endocrinóloga Mary Lee Vance.
El hombre sufre de acromegalia, trastorno causado por un tumor en la pituitaria que exacerba la producción de la hormona del crecimiento y que puede llevar al gigantismo si el trastorno ocurre antes de la pubertad.
La condición puede causar muchos problemas de salud.
“Su esqueleto, sencillamente, no puede sostenerlo”, explicó Vance, quien puso a Kosen bajo tratamiento con un nuevo medicamento que controlaría la hormona del crecimiento.
Hace tres meses, los médicos le dijeron que dejó de crecer.