Curridabat.- Sentada en una acera y contemplando lo que fue su casa durante 18 años, la universitaria Carolina Cuadra Leiva, constató ayer los daños que el fuego causó en calle Los Negritos, barrio San José, en Curridabat.
Tres casas, incluida la suya fueron arrasadas el jueves.
“Le dije a mi mamá que olía a quemado. Salimos, nos fijamos y no vimos nada. Dos minutos después unos primos nos gritaron para que saliéramos. Hasta sacar a mi abuela costó porque un portón que no abría”, dijo Cuadra.
Lamenta que entre lo que se quemó estaban materiales y equipos que usaba en sus estudios de Odontología. También perdió a su perrita.
En total las llamas consumieron 990 metros cuadrados; los bomberos solo pudieron rescatar 300 metros. El incendio fue reportado a las 9:38 p.m. y 10 minutos después llegó la primera unidad desde Desamparados.
Otro factor contra el que tuvieron que luchar los apagafuegos fue el hidrante del frente. Como no estaba habilitado, tuvieron que tomar agua de unos multifamiliares, a 400 metros.
Se vieron afectados seis adultos y dos menores. Rescataron muy pocas pertenencias.
El Cuerpo de Bomberos informó ayer que un daño en el sistema eléctrico de una vieja casa fue la causa del incendio. Hallaron conexiones ilegales y cables que no eran los idóneos. El fuego se originó en la sala comedor.
Vecino había sido denunciado
Otra de las afectadas fue la productora de material didáctico Seidy Maroto y su madre Virginia Alfaro, quienes dormían.
Gracias a una prima, pudieron salir de la casa. Señaló como responsable del incendio a un cuidador de carros que habita en una casa semiderruida.
“Ya habíamos denunciado ante la municipalidad al hombre. Esto ya se veía venir. No hubo chance de sacar nada, salvo estas chancletas”, afirmó Maroto.
Otros vecinos dijeron que al cuidador de carros ya le habían solicitado que desalojara el inmueble.
