Upala. - Un hombre que había sido despedido hace dos semanas, asesinó ayer de cuatro balazos a un excompañero de trabajo con el que mantenía viejas rencillas.
El asesinato ocurrió a las 5:30 a.m., en la comunidad de Pueblo Nuevo, situado 20 kilómetros al norte del centro de Upala.
La víctima fue Andrés Ramos Noguera, de 26 años, quien aguardaba la llegada de un hermano, Juan Carlos, en el corredor para ir a laborar a una construcción.
Tenía dos hijos de 9 y 5 años.
Como sospechoso del crimen, la Fuerza Pública arrestó a dos kilómetros de distancia a un hombre de apellido Ávila, de 51 años.
Familiares de Ramos aseguraron que pese a resultar herido en dos ocasiones, este corrió hacia la casa, donde fue rematado de dos disparos más de corta distancia.
Al parecer, los problemas entre ambos hombres hicieron que el jefe de ambos despidiera al hoy sospechoso, por lo que este decidió vengarse y descargar su ira.
Juan Carlos Ramos, hermano del fallecido comentó que su hermano salió con su machete, ya que el sospechoso también portaba uno, pero que cuando lo tuvo de cerca accionó el arma de fuego.
“Le disparó por lo menos 10 veces, pero solo lo impactó en seis ocasiones”, relató su hermano.
En el sitio no había casquillos, pero horas después los agentes le allanaron su vivienda en La Victoria de Upala, donde los agentes encontraron dentro de un cajón un arma calibre 25 sin balas. La prueba de parafina dio positiva.
