Viernes 6 de agosto, 2004. San José, Costa Rica.



 

BUTACA No 1

Sectas

Leonardo Perucci

Como extraído de un episodio de la serie televisiva "Cuentos de la Cripta" o de un terrorífico relato de Alfred Hitchcok , los espantados ojos de un centenar de feligreses observaron el sábado recién pasado en la Catedral de Santiago de Chile, por primera vez en su historia, el asesinato de un cura.

El sacerdote Faustino Gazzieri, acababa de terminar la misa, eran las 5 y 30 de la tarde. Caminó hacia la sacristía. En ese instante del interior de un confesionario emergió una figura vestida enteramente de negro armada de un filoso cuchillo. Se abalanzó sobre el prelado, lo cogió del cuello y mientras lo degollaba gritó: : ¡Por Satán¡. Los parlantes del templo reproducían el alarido del cura que se desplomaba muerto mientras el agresor se untaba las manos y el rostro con la sangre de su víctima. Pasado el momento de estupor los congregados en el templo mayor de Chile detuvieron al criminal que alcanzó a inferirse un corte en la garganta del que salió bien librado.

Este episodio trajo a colación la existencia de unos 80 grupos satánicos en el país. Se trata de pequeños grupos herméticos, de jóvenes que profanan tumbas, matan animales, visten enteramente de negro y culpan a la sociedad de sus males y terminan en abierta oposición a todos los signos del cristianismo. Un experto en estos menesteres dice: "se trata de personas de ambos sexos con problemas económicos, de inestabilidad emocional, y carencias afectivas en sus vidas".

Cabe preguntarse..¿ qué clase de sociedad heredó Chile después de la dictadura que hace que jóvenes desesperanzados como éste sean tristes titulares de la crónica roja?....¿ Será que el capitalismo salvaje, del que habló el Papa y que en Chile se asentó como una peste excluye la buena formación de nuestros jóvenes?

Muchos podrán decir..."este es un hecho aislado producto de un demente".

Cuidado.., Un país en que cada día es menor, por no decir nula, la participación de los jóvenes en política.

En que para acceder a la Universidad hay que ser rico, en que los índices de alcoholismo y drogadicción aumentan día con día, en que la distribución de la riqueza es una vergüenza, etc., nos hacen sentir una honda preocupación por la orientación que recibe la juventud en una sociedad que privilegia el individualismo y la alienación.

Esto se lo digo a Juan para que entienda Pedro.

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