Martes 18 de enero, 2005. San José, Costa Rica.


Campeonato Nacional 2004-2005


 

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Sin gol
El delantero juvenil Franklin Chacón quedó en deuda en Carson. El equipo entero mostró grandes fallos y el técnico Carlos Watson sería "premiado" con dirigir la Sub 23 en el futuro.
AFP/Al Día

Dios mío, qué papelón

Selección Juvenil que dirige Carlos Watson dejó claro que Costa Rica perdió hegemonía en CONCACAF

Alexander AGUILAR

La eliminación de la Selección Juvenil de Costa Rica para el Mundial de Holanda 2005 encuentra muchas causas que van desde la convocatoria de los jugadores hasta la pésima definición y la mala preparación psicológica de los futbolistas.

Con este revés la Tricolor dejará de asistir a su segundo mundial de la categoría, similar a como sucedió hace dos años cuando se privó de participar en el torneo de Emiratos Árabes Unidos.

Además:

  • Dirigencia alza la voz
  • Ante el rotundo fracaso surgen muchas interrogantes para los dirigentes, miembros del cuerpo técnico y jugadores, a quienes se les notó falta de calidad internacional para competir al alto nivel de CONCACAF, que no es ni la sombra de lo que se podrían topar a nivel mundial. ¿Entonces qué somos para ni siquiera haber logrado el boleto por nuestra área?

    El técnico Julio César Bustos parece tener las respuestas en su análisis del papelón que se hizo en Carson, California, donde la Juvenil terminó tercera en la cuadrangular, superada por Estados Unidos y Panamá.

    "El equipo mostró dependencia de sus dos figuras lesionadas como Bryan Ruiz y Josimar Arias. Además a algunos jugadores les quedó grande la camiseta y no rindieron cuando se necesitaba de su individualidad para sacar la casta.

    "También hicieron falta fogueos contra selecciones de nivel que desnudaran la realidad del seleccionado; por último la escogencia de parte del cuerpo técnico no fue la acertada y por eso no apareció una selección que mostrara seguridad y buen fútbol".

    Sin proceso

    Surge la inquietud del por qué no se continuó con el proceso de la selección infantil que asistió en el 2003 al Mundial Sub-17 de Finlandia, pues a Carson solo asistieron seis jugadores de aquella cita: los porteros Daniel Cambronero y Keylor Navas, el defensa Kenny Mitchel, los volantes José Garro y Gherland McDonald, y el delantero Alonso Salazar.

    Otros de Finlandia 2003 que estaban listos para el torneo que finalizó el domingo eran Josimar Arias, Bryan Ruiz y Pablo Rodríguez, ausentes de última hora por lesión.

    Sin tardar el seleccionador Carlos Watson descarta cualquier tipo de argolla, pero surge la inquietud del por qué quedaron fuera tantos jugadores del anterior proceso de la infantil.

    "A muchos de los jugadores que jugaron en este equipo los conocí hace poco. Además la Sub-17 de Finlandia la manejó el "Puro" (Gerardo Ureña). A Greivin Arce lo vi en el reclutamiento que hicimos en San Carlos, a Esteban (Bolaños, del Cartaginés) lo observé ya en Primera División y a Jody Steward lo miré en Saprissa. No sé porqué hablan de argolla, no lo entiendo", aseveró Watson.

    Pero entonces cuáles fueron las causas de no convocar a un jugador como el volante recuperador santista Diego Gallo, con 41 partidos en la máxima categoría del balompié nacional, según los datos de Luis Solórzano, encargado de divisiones menores del cuadro guapileño, último campeón nacional a nivel Sub-20.

    El Santos igual pudo haber aportado la calidad del contención Crisanto Esquivel (mundialista de Finlandia) o del creativo Jason Zúñiga, también con experiencia en Primera.

    "Ni sumando todos los partidos en la máxima categoría de los jugadores que fueron a Estados Unidos alcanzan la experiencia de Diego Gallo", comentó Solórzano.

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    Sin contundencia
    La Juvenil evidenció enormes fallos en todas sus líneas y falta de jerarquía para manejar la dinámica de los partidos.
    AP/Al Día

    Dirigencia alza la voz

    Los dirigentes del Comité Ejecutivo de la Federación Costarricense de Fútbol (FEDEFÚTBOL), Hermes Navarro y Luis Acuña, así como Roy Morsink de la Comisión de Selecciones mostraron su malestar luego del traspié que dejó a la Selección Juvenil fuera del Mundial de Holanda.

    Los tres directivos estuvieron en Carson, la semana pasada, acompañando a la Tricolor, que volvió a fracasar en su intento de clasificar a la máxima cita.

    "El principal fallo fue la definición y por eso nosotros mismos nos eliminamos. En los tres partidos de la serie fallamos 19 oportunidades de gol y solo anotamos tres veces. Nuestro equipo Sub-20 muestra un retroceso al no haber clasificado por encima de Panamá y Trinidad y Tobago", dijo Luis Acuña. "En el torneo los jugadores mostraron que no estaban preparados mentalmente", agregó.

    Navarro coincidió que el cuadro "falló demasiadas ocasiones de gol y esto se paga caro en torneos tan cortos. Cuando uno se prepara para ir a un mundial y el objetivo no se logra es lógico que hablemos de fracaso".

    Asimismo, Morsink comentó que "no se jugó bien porque los jugadores no aplicaron en el campo lo que habían entrenado y planificado".

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