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El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) investiga el ataque que sufrió un oficial de la Fuerza Pública en una caseta policial, ubicada frente a la radial a la carretera Bernardo Soto.
Carlos SALAZAR/Al Día
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Policía herido de cinco puñaladas Carlos SALAZAR, corresponsal
redaccion@aldia.co.cr
San Ramón.- El agente de la Fuerza Pública de San Ramón, Ramón García Jiménez, de 52 años, se encontraba anoche internado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital local, tras recibir cuatro puñaladas en el abdomen y una en los pulmones, por la espalda.
García fue atacado por un hombre no identificado, a las 5:50 a.m., en la casetilla de la policía, frente al centro comercial Plaza de Occidente, en la radial de la carretera Bernardo Soto.
Según versiones de la familia y de la policía, el hombre fue encontrado en el suelo por un taxista no identificado, que se movilizaba en el taxi 13 y quien de inmediato lo trasladó al hospital, donde le ayudó a subir a una silla de ruedas para ingresar a emergencias.
García fue operado de urgencia y salió de la sala de cirugía cerca de las 11 a.m. y trasladado a recuperación. Posteriormente, se le llevó a la sala de cuidados intensivos, donde es vigilado por equipo médico especializado, ya que se encontraba en estado delicado.
La delegación de la Fuerza Pública informó, escuetamente, que no sabían quién ni en qué circunstancias fue atacado García, cuando apenas le faltaban 10 minutos para hacer el cambio de guardia. En investigaciónEl oficial de guardia, Francisco Ledezma, dijo a este medio que agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), estudian el caso y hacen análisis de las huellas dactilares del agresor, quien dejó el puñal tirado frente a la caseta de seguridad.
La hermana del agente herido, Rosa García Jiménez, síndica del distrito de Santiago, aseguró que ella no se imagina cómo es posible que durante el día se encuentren dos policías en ese puesto y en la noche sólo uno.
Con García coincidió el alcalde de San Ramón, Osvaldo Vargas, quien anunció que solicitará que los agentes de la policía trabajen en pareja, ya que también en el parque durante las noches sólo hay uno.
"Eso es un problema en un cantón en crecimiento poblacional, donde este año se han registrado muchos delitos como robos y ataques contra la integridad física de las personas", precisó.
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En las afueras del Hospital de San Ramón, familiares de Ramón García, esperaban noticias de su salud, ayer a las 10 a.m.. En la gráfica, la hermana Rosalía, su hermano Francisco y su madre Rosalía Jiménez Morales, de 89 años.
Carlos SALAZAR/Al Día
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"Tuve un mal presentimiento" Carlos SALAZAR, corresponsal
redaccion@aldia.co.cr
San Ramón.- Rosalía Jiménez Morales, de 89 años, rezaba ayer en las afueras del Hospital de San Ramón por la salud de su hijo Ramón García, quien recibió cinco puñaladas cuando cumplía su deber de policía en una caseta de la Fuerza Pública.
Doña Rosalía, madre de seis mujeres y cinco hombres, relató que su hijo siempre llegaba después de las 6 de la mañana a preguntar cómo había pasado la noche, y sacaba a orinar a su perrita.
"Esta mañana no llegó a la hora de siempre y yo me preocupaba, porque sabía que Radio Sideral había dicho algo, y yo tuve un mal presentimiento. Cuando llegó mi hija Xinia, yo le dije que ya sabía que me traía una mala razón", agregó.
"Ella me dijo que no me preocupara, que le había pasado algo a Ramón.
Me montaron en una buseta y me trajeron al hospital, pero aquí me paralicé y no podía salir del carro.
Es algo muy feo", dijo doña Rosalía, acompañada de su hijo Francisco y sus hijas Rosa y Xinia.
Recordó que el domingo, María Eugenia Badilla, dirigente local del PUSC, le pidió a su hijo que fuera a votar por un amigo en el distrito de Santiago.
Aseguró que Ramón, desde que tenía cuatro años, le gustaban las armas y quería ser policía, empleo que desempeña desde hace 12 años en San Ramón, donde según ella ha tenido algunos conflictos, como todos los miembros de la Fuerza Pública.
Doña Rosalía relató que su hijo vive con ella desde hace unos 25 años, después de que se divorció, y no se volvió a casar.
"Hoy lo tengo pendiente a la Virgen de los Ángeles para que salga de este sufrimiento", expresó doña Rosalía.
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