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"Gracias a Dios"
Alejo Bogantes, de 50 años, sobrevivió a un infarto agudo el Jueves Santo, gracias a un cateterismo efectuado por médicos estadounidenses y del Calderón.
Herbert ARLEY/Al Día
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Salvan 26 corazones en días santos
Médicos de EE. UU. y Calderón Guardia Sylvia ALVARADO MARENCO
salvarado@aldia.co.cr
La noche del Miércoles Santo todo el sentido de la vida cambió para Alejo Bogantes, de 50 años, quien se encontraba "tranquilo" en su casa en Paso Ancho.
Tras dos "apretonazos" de pecho, similares a un fuerte cólico o un aire en la espalda, y la dificultad para respirar, no tuvo más remedio que hacerle caso a su esposa y salir corriendo para el Hospital Calderón Guardia. "Infarto agudo. Mañana a primera hora le opero el corazón", le dijo el Dr. Manuel Sáenz Madrigal.
"Pensé: 'ahora sí, hasta aquí me la prestó Dios'. Me dolió mucho pensar en que ya no volvería a ver a mis hijos y nietos. La vida me pasó en un segundo".
Ayer, vistiendo una camiseta que le llevó su esposa con la estampa del Corazón de Jesús, Bogantes agradeció a Dios, en la capilla del hospital, la segunda oportunidad que le dio, un día antes del Viernes Santo.
Bogantes, Gonzalo Molina y otras 26 personas pasaron casi una hora con medio cuerpo dormido, escuchando a los médicos explicarles cómo un catéter estaba llegando hasta su corazón para acabar con la obstrucción de las arterias.
Todos fueron sometidos a complejos procedimientos cardíacos durante los días santos, gracias a un convenio de colaboración entre especialistas del Calderón y del Texas Heart Institute, (uno de los más prestigiosos centros cardiológicos del mundo).
Gracias a la visita de los doctores Fish, Cracher y Paniagua, quienes trabajaron junto a Sáenz, 24 personas pudieron acceder al tratamiento que estaban esperando hacía más de un año y otros dos, fueron atendidos de inmediato cuando llegaron a Emergencias, evitando así futuras complicaciones mayores y caras y peligrosas cirugías.
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