|
Clásico Uruguay recibirá mañana a Brasil. Kaká podría ser una pesadilla para los charrúas. EFE/Al Día
|
Coraje contra gambeta
Montevideo / AFP - Casi 55 años después de la victoria 2-1 de Uruguay sobre Brasil en el partido final del Mundial de 1950, celestes y auriverdes reeditarán una vez más un duelo clásico que promete pierna fuerte, gambeta y el regreso de un fantasma que siempre acude a la cita. El miércoles volverán a jugar en el Estadio Centenario.
Con los ánimos templados por su empate a domicilio frente a Chile, el técnico charrúa Jorge Fossati afirmó que la clave será jugar con "humildad".
"Tenemos que tener equilibrio y al atacar hacerlo con decisión total".
El lateral brasileño Roberto Carlos no pudo ocultar su frustración ante la rechifla de los torcedores, el domingo cuando derrotaron a Perú.
"Aquí se gana 1-0 y parece que no vale para nada", se quejó.
"Cuesta mucho complacer al torcedor brasileño, de los más exigentes que hay".
|