Viernes 27 de mayo, 2005. San José, Costa Rica.



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ICE deberá pagar $2,3 millones por daño ambiental

San José, (ACAN-EFE). El estatal Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) deberá pagar 2,3 millones de dólares para compensar el daño ambiental que causó en octubre del 2003 en un río, informó hoy, viernes, una fuente de la entidad.

El presidente ejecutivo del ICE, Pablo Cob, declaró hoy a Radio Monumental que el pago se hará tras haber llegado "a un acuerdo específico con el Tribunal Ambiental".

El ICE, entidad estatal que maneja el monopolio de la energía y las telecomunicaciones en Costa Rica, fue llevado a un Tribunal Ambiental debido al daño que causó sobre las especies acuáticas de un río al vaciar el embalse de la planta hidroeléctrica Peñas Blancas.

Según Cob, el exceso de sedimentos que había en el embalse hizo que éstos se vertieran en octubre del 2003 en el río Peñas Blancas en San Ramón, provincia de Alajuela, 57 kilómetros al norte de San José, lo que provocó la muerte masiva de especies acuáticas.

El viernes pasado, Pablo Cob firmó un acuerdo de conciliación ambiental con el ministro del Ambiente y Energía, Carlos Manuel Rodríguez, según el cual la entidad estatal pagará 2,3 millones de dólares que serán utilizados "en educación ambiental y, en este caso, en la regeneración de las especies acuáticas", dijo Cob.

"Fue un acuerdo al que llegó el ICE para hacer algo que ha hecho a lo largo de toda su historia institucional que es invertir en protección a la naturaleza", agregó el presidente de la institución.

El funcionario reconoció que la cuenca del Río Peñas Blancas "ya estaba degradada y estaba sedimentada, pero la degradación que tenía probablemente no fue dimensionada a la hora de hacer los trabajos de limpieza" del embalse.

El proceso del ICE ante el Tribunal Ambiental no fue un procedimiento penal sino un procedimiento administrativo que fue finiquitado mediante una resolución alternativa de conflictos.

Mediante el acuerdo, el ICE invertirá en un plan de gestión, mitigación y manejo ambiental de la planta hidroeléctrica y trabajará para reproducir especies de peces con el fin de repoblar el río.

La entidad también deberá realizar un estudio para determinar cómo se manejarán los sedimentos de ahora en adelante pues cada año, la represa genera 100.000 metros cúbicos de barro, basura y hojarasca.

Según determinó el Tribunal Ambiental, un nuevo vaciado del embalse, con esa cantidad de sedimentos, podría resultar mortal para los peces de la cuenca.

Como parte del acuerdo, el ICE también deberá invertir en programas de educación ambiental en las comunidades afectadas hasta el año 2009.

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