En una de ellas balearon y asaltaron guarda

Dos chatarreras fueron clausuradas

En un operativo para detener el robo de cobre, alumnio y otros materiales, la Policía Municipal y la Oficina del Ambiente y Patentes de la Municipalidad de San José, clausuraron, el viernes pasado, dos chatarreras de Cristo Rey y Barrio Cuba.

Ambas empresas tenían, además, los permisos de Salud vencidos, indicaron fuentes policiales.

Unos 40 trabajadores del Centro de Acopio Recoprimax en Barrio Cuba, se vieron obligados a dejar sus puestos.

“Aquí no se reciben materiales de dudosa procedencia. Jamás se recibe eso, si no ya estaría en la cárcel”, manifestó Érick Jiménez, propietario de Recoprimax.

Las chatarreras afectadas podrán volver a operar cuando consigan la renovación del permiso del Ministerio de Salud, pues, según Gerardo Castro, uno de los trabajadores, se trata de un vencimiento.

Castro señaló que ellos no les compran a indigentes, y tienen todo limpio y ordenado, por lo que harán las gestiones cuanto antes.

Contiguo al templo católico de Cristo Rey se selló otra chatarrera por falta de permisos y por denuncias de que adictos llegaban a vender chatarra para mantener sus vicios, dijo Carlos Madrigal, supervisor del Departamento de Ambiente de la Municipalidad de San José.

Madrigal aseguró que han recibido denuncias de gente quejándose del robo de interruptores, cable, aluminio y otros artículos que luego tratan de vender a este tipo de empresas.

Las chatarreras reciben, además, papel y cartón cobre.

En la de Barrio Cuba, balearon desde un carro la madrugada del viernes al guarda Juan Carlos Pineda , quien cuidaba dos furgones cargados.

Pineda permanece internado en el hospital San Juan de Dios; ayer lo reportaron estable.