México derrota 1-0 a Costa Rica en Copa de Oro

Houston / DPA.- La selección mexicana venció hoy por 1-0 a su similar de Costa Rica en la prórroga, con un gol de Jared Borgetti, y clasificó así a las semifinales de la Copa de Oro que se disputa en Estados Unidos.

En el estadio Reliant de Houston, un cabezazo de Borgetti a los 97 minutos fue suficiente para que México eliminara en cuartos de final al plantel costarricense y se asegurara la disputa de una de las semifinales del certamen con el ganador del choque que disputan más tarde Honduras y Guadalupe.

El seleccionado mexicano, que comanda Hugo Sánchez, volvió a sufrir para superar a uno de sus rivales más endebles hasta el momento en el certamen y a pesar de su superioridad numérica, ya que Costa Rica terminó con dos hombres menos en la cancha.

México, que la próxima semana disputará la fase de semifinales en Chicago, jugó varios pasajes del cotejo con buenas pinceladas de fútbol, aunque Costa Rica fue el adversario más débil de los que había enfrentado hasta hoy (Cuba, Honduras y Panamá).

De la primera mitad, lo más destacado fue la expulsión del jugador costarricense Allan Alemán, por doble amonestación a los 42 minutos del cotejo disputado frente a unas 60.000 personas en el Reliant.

Con pocas aproximaciones de gol en ese lapso, al menos un disparo de gol de Carlos Salcido fue tapado por un defensor costarricense y otro de Andrés Núñez, desviado.

Cuando se jugaban los últimos instantes de la primera parte, Alemán dejó al seleccionado centroamericano en inferioridad numérica por reclamar al árbitro estadounidense Terry Vaughn.

Con la ventaja numérica a su favor, el representativo comandado por "Hugol" presionó y trató de desbordar por los extremos con cierta lucidez ofensiva, pero el rival se defendió bien los 21 minutos iniciales de la segunda parte con dos líneas defensivas de cuatro jugadores, y con esporádicos ataques de contragolpe.

Fue así como a los 66 minutos, Jaime Lozano llegó solo por izquierda y disparó de zurda a las manos del arquero José Porras. Un minuto más tarde, Salcido sacó un potente disparo que Porras atajó con una estirada a su costado izquierdo y evitó la caída de su meta.

A los 69', Borgetti robó un balón a un jugador costarricense y tras controlar el esférico disparó de derecha hacia un costado del poste derecho del arco defendido por Porras.

En un intento desesperado por marcar un gol, el seleccionador mexicano Sánchez llevó a la cancha al ariete Cuauhtémoc Blanco, en lugar del mejor jugador hasta ese momento, Gerardo Torrado, con una tarjeta amarilla, a los 75'.

A pesar del ingreso de Blanco, Costa Rica equilibró las acciones con buenos marcajes sobre Andrés Guardado por izquierda y Blanco, y tuvo al menos dos disparos desviados al marco defendido por Oswaldo Sánchez.

A los 88 minutos, el conjunto centroamericano jugó al contragolpe y con un largo servicio al área, Gabriel Badilla hizo un remate frontal con la cabeza, pero el esférico se estrelló en el travesaño, en la mejor jugada de gol de todo el cotejo.

A los 90', Blanco respondió con un disparo bien colocado de derecha que el arquero Porras alcanzó a desviar, con lo que forzó la disputa de dos tiempos extras de 15 minutos cada uno.

Finalmente, a los 97', Adolfo "Bofo" Bautista, que seis minutos antes había entrado a la cancha por Omar Bravo, dio el primer pase medido a Borgetti, quien tras hacer un salto fenomenal remató prácticamente solo de cabeza para vencer a Porras para poner el 1-0.

Un minuto más tarde, el defensor del Stuttgart alemán Ricardo Osorio disparó desde fuera del área y Porras, en un gran lance, atajó el que pudo ser el segundo tanto mexicano en el partido.

A los 13 minutos de la prórroga, Alvaro Saborio fue expulsado por una supuesta agresión al central Francisco Javier Rodríguez, para dejar a Costa Rica con nueve hombres en el campo.

El segundo tiempo extra resultó de tramite para el equipo mexicano, no así para su rival centroamericano, que llegó a tener un remate de cabeza de Badilla que pasó ligeramente desviado. Entonces, el equipo de Sánchez respiró, y poco después festejó un triunfo tan ajustado como merecido.