Corazón Partío

Me siento engañado

Cuando me siento mal me hago mucho daño. Cuando me deprimo me corto en el brazo y a veces tomo pastillas para subir mi ánimo. De repente apareció un muchacho que se convirtió en mi amigo, casi como en mi hermano y me confió cosas importantes. Yo pensé que podía confiar en él y le conté lo que hacía. Él empezó a ayudarme con mis problemas. Yo he arriesgado mucho por este amigo, lo encubrí en una cosa y me terminaron echando la culpa, inclusive hasta me botaron del colegio. Ahora tengo una pésima reputación en el colegio y he perdido muchos amigos. Además tuve peleas inmensas con mi familia por su culpa. Yo sí cumplí mi deber como amigo y estuve ahí cuando él lo necesitó. Él hace un mes tuvo un accidente en el cual casi se muere y ¡yo lo apoyé! Se podría decir que teníamos una amistad increíble, pero este año descubrí que estoy muy enfermo y probablemente no sobreviva a esto. Nadie sabe que sobre mi enfermedad, ¡ni siquiera mi familia! Y me sentía tan mal que se lo conté a mi amigo. Él se iba a vivir a otro país, pero me dijo que había decidido quedarse para apoyarme hasta el final porque yo era su amigo. Hablé con él por teléfono y me dijo que se iba a quedar aquí para apoyarme y también por otra cosa más. Pero ahora él no me habla y ni siquiera me saluda. Es mentira que él se quedó para apoyarme. Me siento como un idiota por confiar en la gente.

Chico deprimido

Parece que eres muy negativo, ves todo negro cuando puede ser de colores, no digo que no tengas motivos para sentirte mal. Pero hay que ver la vida de otro modo. No puedes aferrarte tanto a una persona porque esta te puede fallar.

Al final de cuentas los familiares son los únicos que siempre están para uno. Cuéntales que estás enfermo, tendrán que saberlo tarde o temprano y seguro que no te van a dejar solo. Ese problema que tienes, que te hace herirte cuando estás mal, precisa de ayuda psicológica.

Mira: sea cual sea tu problema, tienes que pensar que no todo puede ser tan malo, te debes apoyar en tu familia.

Espero que te vaya bien, que aprendas a ver las cosas con un poquito más de optimismo y que busques la ayuda que puedas necesitar para no seguir hiriéndote vanamente.