Isaac Lobo

Las tardes y el mediodía son suyos en la radio Los 40 Principales, pero su corazón los comparte con los dos.

Gustavo Gamboa, el fortachón de “La hora sin nombre” y de “Satélite 40”, comenta que no es el mismo desde que Dios entró a su vida y ahora sale con una chica, quien le da mucho cariñito.

Es por estas razones que ya no se le escucha tan gruñón como antes y no ha vuelto a animar en bares como lo hacía años atrás.

¿Cómo empezó en la radio?

En el 2002 en Radio 103, luego pasé a Los 40 Principales, donde llevo cuatro años.

¿Y como animador?

Jalando chunches, cables y parlantes, en una discomóvil de un amigo. Primero no me pagaba nada, luego un día se necesitaba un animador para un carnaval, él no sabía y le dijeque yo lo hacía. Me pagaba ¢5 mil. Luego entré al grupo de animadores de Demasa y de ahí a los bares Azteca y Tabaruba.

¿Era muy fiestero?

No, pero sí se daba mucho, era normal que los animadores se bajaban borrachos de la tarima.

¿Qué frases no volverá a decir como animador?

“¿Dónde están las solteras?”.

Una lección de animación en cinco segundos

Todo gira en tres puntos: los amigos, ¿cómo la pasan los ‘compas’? y buscar a los más animados. El deporte, pero sin decir ¿dónde están los saprissistas? y la soltería, en eso se basa.

¿Es amargado?

Puede ser que sí. Era medio amargado, pero ya no tanto. Estoy tratando de cambiar.

¿Cómo cambió?

Me acerqué a Dios.

¿Tiene novia?

No, pero estoy saliendo con alguien.

¿Cómo le dio un beso a Christy Marín en medio de chicharrones y yucas?

Esa fue la primera salida, fuimos a Acserí. Ahí no le dí el beso, fue después.