Lo ideal es que los conductores adopten una conducta responsable frente al volante en todo momento, pero la realidad indica otra cosa.

“Tenemos una situación de incultura vial. Vemos cómo día con día, ocurren hechos dramáticos por personas que conducen bajo la influencia del alcohol y cometen otras acciones que los choferes no consideran importantes”, dijo el director de Tránsito, German Marín.

Agregó que el objetivo de la nueva Ley de Tránsito, es fomentar una adecuada cultura vial y hacer que el conductor se inhiba de cometer imprudencias fatales.

“A los conductores responsables no les importa que esté un oficial cerca o que las multas que se impongan sean altas porque siempre andan al día y manejan con responsabilidad”, aseguró Marín.

Dijo que la gente está preparada para asumir las consecuencias de esta fuerte normativa.