Escazú.- Manuel Marín llevó ayer a su hijo de nueve años a hacer la Primera Comunión al templo católico de San Antonio de Escazú y allí le llegó la noticia del hallazgo del cuerpo de una más de sus primas, víctimas de la tragedia en calle Lajas.

“Ya encontraron a los tres”, le dijo antes de abrazarlo y llorar en su hombro Maritza Hernández Marín, quien le contó que se trataba de su prima hermana Blanca Rosa Marín, quien falleció con su esposo Manuel Zúñiga y su cuñado Adonay Zúñiga.

“Yo no he podido dormir pensando y pidiéndole a Dios de que encontraran los cuerpos de ellos para darles una santa sepultura”, comentó con voz quebrada la vecina de San Antonio de Escazú.

“Es muy duro”, repitió don Manuel, mientras bajaba con tristeza la cabeza y contabilizaba ya nueve familiares sepultados.

“A mí no me pasa, parece que es todo una mentira que arrasó con toda mi familia”, dijo con angustia Maritza.

Noche terrible

“Un primo mío me dijo que él oyó un estruendo y que él acató a jalar al nietito, y le decía a todos los hermanos que salieran y salieran, pero nadie lo oía porque estaba oscuro y había mucho ruido.

Él dice que corrió y se metió a un cafetal y vio el montón de agua que pasaba y al montó de casitas que se las llevaba la avalancha”, narró la escazuceña.

“A mí me llamó (esa noche) una cuñada de El Carmen diciendo que a mi familia le había pasado eso. Desde ese momento apoyamos a los que están vivos ahora, que son el resto de primos”, agregó con resignación.