Neyssa Calvo Achoy
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A donde quiera que vaya atrae la mirada de la gente, no solo por ser la presentadora del espacio “Informe 11: Las Historias”, sino por su porte y carisma.

Carolina Sánchez o como muchos le dicen “La Flaca”, nació en la cuna donde emergen las mujeres más bellas del mundo: Venezuela.

Incluso creció con la fija idea de convertirse en modelo y entrar al concurso de Miss Venezuela. Así que trabajó en ello hasta los 21 años cuando le dijeron que para alcanzar ese sueño debía pagar para moldear su figura con bisturí.

Ahí acabó su esperanza de coronarse como la más linda de su país, pero continuó haciendo desfiles de pasarela para diseñadores de alta costura y varias marcas.

El tiempo pasó y la vida dio un giro cuando dejó el mundo de los flashazos para concentrarse en las finanzas y en una nueva casa: Costa Rica.

Llegó a esta tierra en 1995 y hace 11 años se convirtió en mamá y hoy por hoy su hija Sara es su mejor amiga.

En ese tiempo ha tenido grandes logros, pero también fracasos que ahora los mira como escalones difíciles que con esfuerzo superó.

La vida la puso cuesta arriba cuando sus padres se divorciaron, enfrentó su propio divorcio y la pérdida de su primer bebé, cuando tenía más de tres meses de embarazo.

Tragos amargos, pero de cada uno aprendió que “la vida sigue y que Dios tiene nuevas cosas cada día”.

Pensó que tras la ruptura de su matrimonio simplemente moriría, pero al tiempo se dio cuenta que una nueva vida comenzó para ella.

Ahora es el sustento de su casa. Además, retomó su pasión por los idiomas y aprendió italiano.

Estudia francés y pronto va tras lo que sería su quinto idioma: alemán. Y hasta Cupido parece que la flechó.

Lo que sí dejó atrás como una marca de su nueva vida, fueron las clases de ballet que retomó hace unos años.

A lo mejor uno de sus retos fue la pantalla chica en medio del nuevo aire que tomó su vida.

Y al hacerlo se permitió un acercamiento más íntimo con los ticos que la miran como una más del grupo. Tan sólo hace falta caminar unos minutos a su lado por la Avenida Central para darse cuenta de ello.

Le siguen sus pasos y más aún, quieren escuchar las carcajadas de la “chama-tica”, quien llegó para quedarse.

Un vistazo

Su día empieza a las 5:45 a.m. cuando su hija que según dice, es su clon, se prepara para ir a la escuela. Hace mucho ejercicio y recibe masajes dos veces a la semana. Toma dos litros de agua al día y té verde, en general se cuida de no comer con grasa.

Tiene un título como modelo, periodista y una maestría en negocios con énfasis en mercadeo. Su pasión es la organización de eventos y fiestas. Es muy casera, le gusta cocinar, regar las plantas, bailar y sobretodo sonreír en todo momento.

Se cuida mucho la piel con cremas y lucha contra la celulitis. La gente le dice que es una mujer sensual, pero no le interesa serlo. Se considera una mamá alcahueta, pero confiesa que es una loca del orden y la limpieza. Como siempre ha sido muy estudiosa y entregada en lo que hace se lo exige también a su hija. A dos meses de concluir el 2010 sostiene que ha cumplido con la mayoría de sus metas. Una de ellas correr la carrera de la marca Avon, de 10 kilómetros, lo que logró hace unas semanas con entrenamiento.