Carlos Láscarez S.
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Escazú.- El anciano de 87 años que el martes pasado fue brutalmente golpeado y lanzado a una quebrada por un hombre que le intentó robar, aseguró ayer que sin la ayuda de un vecino no hubiera logrado salir de la margen.

Así lo expresó José Rafael Rodríguez Ramírez, desde la cama 450 de la sección de Cirugía de Hombres del Hospital México, donde se mantiene bajo observación tras la vapuleada recibida.

“Estaba despierto y salí porque escuché bulla. En eso, el maleante me golpeó y luego me empujó al río”, relató despacio mientras veía sus golpes.

“No sé si me robó algo. Seguro voy a regresar a mi casa, ya que no tengo otro lugar”, comentó ayer.

Agradeció la ayuda de un vecino a quien identificó como “Coco”, quien salió en su auxilio y lo cargó hasta que llegó Cruz Roja.

Recordó que de joven laboró como canastero y en construcción. Además, fue enfático al señalar que no fuma, ni toma, que nunca se casó y que algunos de sus familiares habitan en un caserío de La Uruca.